Los choques se registraron después de que los vecinos de Villa Nueva, al sur de la capital de Guatemala, en disconformidad con la medida del gobierno municipal de incrementar las tarifas de agua y recolección de basura, se organizaron y bloquearon las dos vías de la carretera El Pacífico, que conecta su localidad con la capital.
La Policía recurrió al uso de gas lacrimógeno para dispersar a los manifestantes, después de no alcanzar convencer a los indignados de que desistan de mantener el bloqueo de las vías, según indicó a periodistas el portavoz de los Bomberos Voluntarios, William González.
Estos enfrentamientos dejaron a varias personas con contusiones y otras presentaban síntomas de asfixia por la inhalación de los gases.
Mientras los lugareños se oponen a los incrementos tarifarios, que en el caso del servicio de agua potable se ha sido triplicado, las autoridades locales defienden que tales decisiones "no son desmedidas" y, en particular, el alcalde de Villa Nueva, Edwin Escobar, dijo no entender la postura de sus conciudadanos.
No obstante, la Alcaldía aseguró que está abierta a recibir propuestas, recalcando que es "inviable" mantener las tarifas actuales, ya que, según argumenta, cuenta con un déficit anual de 40 millones de quetzales (unos 4,7 millones de euros) anuales.
Nada más aprobada la subida en las tarifas en enero, un grupo de aldeanos comenzó sus protestas y logró que se estableciera una mesa de diálogo impulsada por la Procuraduría de Derechos Humanos, pero el malestar continuó debido a que la Casa Consistorial no dio marcha atrás con las nuevas tarifas.
El pueblo guatemalteco en 2015 ha salido en muchas ocasiones a la calle a protestar contra la corrupción que reinaba en el seno del gobierno del presidente Otto Pérez Molina, ahora encarcelado.
