Es que no era para menos, también se sabía de antemano de la presencia de Fabián Felman, Secretario general de SICIABA - CEA; Daniel Tanito Catalano, Secretario General de ATE CABA; Carlos ortega, Secretario General de SECASFPI; Hugo Yaski, Secretario General de la CTA de los Trabajadores; Walter Correa, Secretario General del Gremio de Curtidores y Vanesa Siley, de SITRAJU, que arrebató el gremio porteño de judiciales a Piumato, estos últimos tres candidatos, además, a diputados nacionales por Unidad Ciudadana.
Entre los numerosos asistentes estuvieron además numerosos concejales y candidatos a concejales, como el actual presidente del PJ y del deliberativo local, Juan Fabiani, que va por su reelección; José Lepere, presidente del bloque FpV-PJ; María Rosa Martínez; Norma Warrell y Nacho Villaronga, entre otros y consejeros escolares, como Leo Herrera, que preside el consejo escolar y va por su reelección en el cuerpo.
En un clima fervoroso, donde hablaron, casi todos los dirigentes gremiales presentes, los ejes fueron varios, pero todos en sintonía con el claro objetivo de obtener un triunfo en octubre que permita detener las políticas antipopulares del gobierno neoliberal de Mauricio Macri y la Alianza Cambiemos.
Algunos de ellos, como Vanesa Siley, candidata a diputada y dirigente de judiciales porteños, fue minuciosa en precisar los principales puntos de la propuesta electoral de Unidad Ciudadana, a los que se comprometió a honrar.
Hugo Yaski, por su parte, valoró positivamente el compromiso firmado por los candidatos de respetar en el recinto la propuesta electoral de Unidad ciudadana.
A su turno Walter Correa, de curtidores, fue contundente en la necesidad de dar batalla por los derechos sobre los que marchan, inexorablemente, las políticas del gobierno derechista de Cambiemos.
Mientras los miembros de la Corriente Federal de los trabajadores anunciaron el llamado a una movilización el 7 de agosto, Día de San Cayetano, desde la CTA manifestaban las nuevas medidas de fuerza previstas y adelantaban que iban a acompañar la medida t desde otro de los oradores se destacaba la importancia de que en la mesa, más allá de las organizaciones que integraran se encontraran representante de trabajadores preocupados por defender sus derechos.
Al cabo de algo más de dos horas, y con los oradores habiendo dicho lo suyo, fue el tiempo de selfies y marcha peronista para desmovilizar y comenzar a emprender una retirada que hubiera molestado a quienes critican las movilizaciones kirchneristas por la falta de choripanes y micros que habilitaran sus críticas.
Informe y Fotografía: Hugo Delgado
