“De momento vamos a reforzar de forma preventiva la vigilancia de la frontera garantizada por la policía de fronteras”, ha declarado este martes Nikolay Karaivanov, un responsable de operaciones en el Ministerio búlgaro de Defensa, a la radio pública BNR, y ha añadido que “su número puede aumentar si la situación se agrava”.
Hasta el momento, las decenas de miles de personas que tratan de trasladarse desde Siria, Libia y otros países hacia el centro de la Unión Europea atravesando los Balcanes han evitado Bulgaria, país que a principio de año estableció campos de concentración para refugiados en los que alberga a unos 15.000 inmigrantes indocumentados.
La organización transnacional con sede en Londres Amnistía Internacional advirtió el pasado domingo del destino incierto que aguarda a los migrantes llegados a Macedonia en los últimos días, cuando crecen en una Europa Occidental marcada por el deterioro económico los movimientos de carácter xenófobo.
