Los cuadros habían sido realizados por estudiantes y docentes del instituto de Formación Docente en articulación con el Ministerio a través del programa Memoria del Proyecto Educativo Bicentenario. Formaban parte las áreas de DDHH y pedagógicas del Ministerio en el que participaron 2.700 alumnos y profesores.
“Los trabajadores nos encontramos con una nueva embestida por parte de la nueva gestión. Estos cuadros formaban parte de un herramental pedagógico que permitiera insertar nuestra historia reciente en los establecimientos educativos reforzando la idea democrática del Nunca Más y rompiendo con la falsa concepción de la teoría de los dos demonios”, sostuvo Rodrigo Recalde, delegado gremial de ATE en dicho ministerio.
Además de los retratos de estos docentes y luchadores gremiales, también fue retirada una gigantografía de Eva Perón inaugurada el 26 de junio de 2010 con el propósito de resaltar su figura en la vida política y social argentina dentro de las escuelas.
Recalde afirmó también que ATE solicitó un informe al ministro para que explicara cuál iba a ser el destino de esos trabajos, pero aún no han recibido respuesta.
En tanto, desde CTERA repudiaron el hecho como una “muestra de intolerancia y de falta de respeto a docentes desaparecidos y al trabajo colectivo de estudiantes y docentes de todo el país deja a las claras el sesgo autoritario del Ministro de Educación”. Y exigieron al ministro que “en memoria a la lucha y compromiso por la educación pública de nuestros maestros asesinados y desaparecidos, reponga de forma inmediata los cuadros de Arancibia, Vilte y Lotufo”.
Esta acción sucede después del despido del 25% de los trabajadores del Instituto Nacional de Formación Docente (INFoD).
*Por Eliana Verón, APU
