Sindicatos y organizaciones estudiantiles francesas organizan la cuarta jornada de protesta, en la que, además, hay convocadas alrededor de 170 manifestaciones en todo el país.
El evento nacional organizado en París ha reunido a 8000 participantes, según las cifras de la Policía, mientras los sindicatos han estimado la cifra de 40.000, los manifestantes en la capital.
“Macron y los patrones están librando una guerra social, planeemos el contraataque”, decía una pancarta de la Lucha Obrera, un partido de la extrema izquierda en París.
Lyon, Burdeos, Estrasburgo y así como varias otras grandes ciudades de Francia han sido testigo de las masivas marchas de sus ciudadanos que repudian, además, los recortes del gobierno en temas sociales.
Sin embargo, el eje de la protesta es el proyecto de ley de la reforma laboral, que se espera sea definitivamente ratificado por el Parlamento a comienzos de diciembre.
El texto deteriora las normas legislativas del empleo y de los convenios sectoriales. Además, facilita los despidos masivos por motivos económicos.
