Una comitiva de funcionarios viajó de urgencia al país del norte para encarrilar un acuerdo que finalmente no ocurrió dado que la administración de Trump tomó una decisión definitiva que sentencia la suerte de la exportación argentina del producto al país del norte.
Claramente Argentina no interesa a la administración del Macri norteamericano y el ex socio de SOCMA demuestra cada vez que puede su desprecio por el presidente argentino y por nuestro país con constantes medidas que atacan nuestra economía pese a las constantes demostraciones de obsecuencia de nuestro gobierno.
Desde la insignificante compra de limones, planteada como un triunfo histórico por el gobierno macrista, hasta la sanción a la importación de biodiesel, la administración Trump, que no pocos ven como el "Macri estadounidense", permanentemente ha tomado medidas proteccionistas respecto a nuestros productos.
Cuando Mauricio Macri abandonó Washington, tras reunirse con CEOS para intentar atraer inversiones, el gobierno de Donald Trump confirmó sanciones definitivas contra el biodiésel argentino. El Departamento de Comercio estadounidense determinó que "la Argentina está otorgando subsidios injustos a sus productores", por lo que las tasas impositivas quedarán por arriba del 70%.
Lo que esconde esta afirmación y esta medida son dos elementos sustanciales: el primero que todos los gobiernos otorgan subsidios a sus productores y los norteamericanos no son una excepción y la segunda que en realidad las sanciones son medidas proteccionistas del mercado norteamericano que no es capaz de competir con el costo argentino.
La incógnita, en todo caso, es porque el gobierno argentino no denuncia estas medidas proteccionistas que abomina para nuestro mercado permitiendo ingresar todo tipo de productos que minan la productividad y los puestos laborales en nuestro país.
Hace 10 días una comitiva encabezada por el secretario de Comercio, Miguel Braun, viajó de urgencia a Washington para cerrar un acuerdo que nunca se concretó. El Gobierno quería pagar 27% de impuestos, un número alto pero que creían que garantizaba que el precio del combustible argentino sea similar al local.
Al conocerse la noticia, la embajada estadounidense intentó dar una explicación a través de redes sociales. Desde la cuenta de Twitter oficial el encargado de negocios enviado por Trump, Tom Cooney, aseguró que las inversiones continuarán "pese a la cuestión del biodiésel".
La embajada también busco destacar que "Estados Unidos y Argentina están profundizando la relación que supera con creces cualquier cuestión puntual o tema de exportación".
