Mediante una carta abierta dirigida el sábado a Netanyahu, unos 400 rabinos denunciaron la demolición de viviendas palestinas y pidieron el cese de construcciones ilegales de ese régimen en la ocupada Cisjordania afirmando que esta medida contradice las leyes internacionales.
La misiva apostilla que debido a la destrucción de cientos de casas al año, "miles de palestinos se han visto obligados a construir (hogares) sin permiso".
El régimen de Tel Aviv tiene la obligación de garantizar condiciones adecuadas a todos los seres humanos que viven en los territorios ocupados palestinos, independientemente del resultado del proceso de paz, afirmaron los rabinos.
Los rabinos han adoptado esta postura después de que Netanyahu, ordenó el pasado viernes al ministro de asuntos militares, Moshe Yaalon, destruir 400 casas de la Unión Europea (UE) edificadas para palestinos en la ciudad de Al-Quds (Jerusalén), bajo el pretexto de que han sido construidas sin permiso.
Tras el hecho, la UE denunció que "la construcción de dichas viviendas se ha basado en la necesidad de los palestinos de vivir en lugares seguros".
Pese a que la comunidad internacional enfatiza que, en concordancia con el derecho internacional, todos los asentamientos del régimen israelí en Cisjordania son ilegales, el régimen de Tel Aviv ha hecho caso omiso a estas normativas y ha demostrado que no respeta las leyes internacionales.
Más de medio millón de israelíes viven en unos 120 asentamientos ilegales construidos desde la ocupación de los territorios palestinos en 1967 en Cisjordania, incluido Al-Quds.
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- Una lista en línea de los rabinos que ya han firmado
