Durante la manifestación convocada por la TUC su secretaria general, Frances O'Grady, expresó que 'hay un nuevo ambiente en el país, pero ahora reclamamos 'un Nuevo pacto', con un incremento del salario mínimo, la eliminación de los contratos de 'cero horas', y mayor inversión para la educación y la sanidad'.
O'Grady dijo que 'el sindicato empoderará más a los trabajadores, al reforzar sus derechos y libertad de organización'.
Asimismo el líder sindical de Comunicaciones, Dave Ward, subrayó que 'la presión en el entorno laboral hacia los trabajadores aumenta, caracterizado por la propagación de los contratos frágiles que conllevan a que miles de personas se declaren inseguras y opten por la autogestión'.
La TUC agrupa a más de seis millones de afiliados en este país, y de acuerdo con un estudio reciente de la confederación, 'los salarios de los empleados británicos sufren su mayor estancamiento en la historia moderna'.
El Reino Unido registró en el primer trimestre de 2018 un aumento del producto interior bruto de solo el 0,1 por ciento, su peor nivel desde 2012, comparado con 0,4 por ciento a finales de 2017.
Una serie de datos difundidos el jueves último por la Oficina Nacional de Estadísticas confirman que la economía británica sigue débil después del voto favorable al Brexit o salida del Reino Unido de la Unión Europea del 23 de junio de 2016.
