Sigue el pulso entre el Gobierno francés y los “chalecos amarillos”. Decenas de miles de ciudadanos han bajado a las calles en el capítulo XI de este movimiento social sin precedentes. 11 sábados consecutivos pidiendo justicia social, pidiendo mejores condiciones de vida. Más de dos meses en los que el gobierno sigue sin dar una respuesta aceptable a los “chalecos amarillos” que culpan directamente a Emmanuel Macron.
El movimiento de los “chalecos amarillos”, un movimiento heteróclito en el que participan tanto ciudadanos de las zonas rurales como de las urbanas, en el que se mezclan parados, asalariados, estudiantes o jubilados, en el que se manifiestan, codo con codo, electores progresistas, conservadores y abstencionistas, un movimiento que se encuentra ante una encrucijada política.
¿Se convierten en movimiento político y presentan listas a las elecciones europeas del mes de mayo o siguen siendo solo un movimiento social que ocupa las calles? Varias de las figuras más conocidas de los “chalecos amarillos” han decidido presentar listas en las elecciones europeas.
Un sondeo del instituto demoscópico Elabe acredita una lista de “chalecos amarillos” de un 13 % de intención de voto, lo que los situaría como tercera fuerza política. Pero entre los propios chalecos amarillos no existe unanimidad sobre el interés de convertirse en movimiento político.
Esta jornada de movilizaciones en todo el país ha visto a más de 69 000 manifestantes en las calles. Una jornada donde se han producido enfrentamientos con la policía en ciudades como París (capital de Francia), Toulouse (suroeste), Nantes (centro-oeste) o Burdeos (suroeste).
Los “chalecos amarillos” que han vuelto a acusar a la policía de violencia gratuita tras conocerse que uno de los organizadores de la manifestación parisina ha resultado herido.
Por Juan José Dorado, HTV, París
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