El dirigente dijo que "la producción de ladrillos artesanales está virtualmente parada, por lo tanto los trabajadores de este sector experimentan no sólo la desaparición de las fuentes de trabajo, sino también un deterioro importante en los precios que pagan quienes comercializan el ladrillo para conservarlo en los corralones".
"Los productores de ladrillos, en muchos casos cooperativas - afirmó - dejaron de percibir ingresos hace meses y esto ha dejado a los trabajadores en situación de intemperie, frente a un aumento generalizado de los alimentos y la canasta básica".
Cáceres anunció que se reunirá con empresarios y otros gremios de la construcción para buscar una solución conjunta y demandar una intervención del Estado que ampare a este sector de la economía popular, sometido a un plan económico recesivo.