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» » Lorena Albarracin otra víctima del Gatillo Fácil

(11/06/17 - Violencia Institucional)-.Desde afuera se escuchaba que la mujer de Edgar gritaba, “soltá el arma, soltá el arma”, nos estábamos yendo. Luego escuchamos el disparo, “me dió”, dijo mi mamá y enseguida se desvaneció. Se cayó en mis brazos, junto a mis hermanas. Yo le decía, “no cierres los ojos, no cierres los ojos, quédate conmigo”, el desesperado relato es de Ludmila, la hija mayor de Lorena Albarracin de 36 años, asesinada por la espalda por un policía en Glew. Lorena, tenía dos trabajos y había participado del último #NiUnaMenos. 

Horas antes, Edgar Alberto Brian Yedro Ocampo de 26 años, miembro de la Policía de la Ciudad, había interceptado al hijo menor de Lorena, quien volvía de la escuela, acusándolo de romper una luminaria de la calle. Tras insultos, sobrevino un puñetazo en la cara, una patada y el golpe de una pinza sobre la cabeza del joven.

Edgar Ocampo hacia apenas dos años que estaba en la fuerza, había ingresado como gendarme y ahora prestaba servicio para la "flamante" Policía de la Ciudad, un rejunte entre la Metropolitana y la Federal. Durante la movilización a la comisaria, los vecinos del barrio comentaron que él decía sobre su ingreso a la policía, "yo entro para bajar a todos estos".

Lorena, alzo a su bebe de 3 años y tomó de la mano a otra de sus hijas. Caminó, enojada, hasta la esquina, y al llegar le pidió explicaciones a Edgar Ocampo por los golpes que le había dado a su hijo. El agente atendió desde la ventana de su casa; “tomátelas trola de mierda”. No quería hablar y sentencio al hijo de Lorena, "a tu hijo lo voy a matar". La discusión, se tornó insultos. Lorena cerró la discusión advirtiendo a Ocampo que haría la denuncia por las amenazas, tomó a sus hijos y se dio media vuelta para volver a su casa. 

En ese instante se escucha que Edgardo (foto derecha) estaba discutiendo con su pareja quien entre gritos le pide: “soltá el arma, soltá el arma”, segundos despues nos cuenta Ludmila, Lorena, que traía en brazos a su beba de 3 años, balbucea; "me dio" y cayo desvanecida en los brazos de su hija mayor de 17 años; "Se cayó en mis brazos, junto a mis hermanas. Yo le decía, ’no cierres los ojos, no cierres los ojos, quédate conmigo’ ”. Según los vecinos, Edgardo realizó un solo disparo, desde la ventana de su domicilio, que impactó en la espalda de Lorena y llegó hasta su corazón.

Luego, llegaron varios patrulleros, "quienes no dejaron que nadie se acerque ni la auxiliaron". Los vecinos y familiares dijeron que la ambulancia tardó 45 minutos en llegar para luego llevar el cuerpo de Lorena al Upa de Longchamps, "donde no tienen capacidad para asistir en estos casos". Inmediatamente fue trasladada al hospital Lucio Meléndez donde falleció.

Cómo era Lorena
Era una madre soltera que se deslomaba por criar a sus siete hijos. Tenía dos trabajos y más de una vez "se la veía volver a las doce de la noche" de Capital Federal de limpiar oficinas para una empresa que la había contratado en negro. "Los 4000 pesos que ganaba en la cooperativa no le servían para sostener la familia".

"Lorena era una chica sumisa, hablaba poco, era buena compañera", decía una joven compañera de la cooperativa "Las Huellas" que es parte del "Ellas Hacen", programa destinado a la ayuda de mujeres que sufrieron violencias. Con ese grupo de mujeres, hacían varias tareas como limpiar el club del barrio "9 de julio" o confeccionar repasadores, almohadones, sábanas "para vender entre los vecinos y conocidos". Lorena tenía en su casa la bandera de la cooperativa y ese día se la iba a entregar a una amiga.

"Es terrible, Lorena, participo del último Ni Una Menos y hoy es una víctima, no solo del gatillo fácil sino que del machismo que nos mata", contaban sus amigas.

El pasado viernes, mientras Ocampo permanecía detenido en el penal de Florencia Varela bajo la carátula de homicidio calificado en primer grado, se realizó una movilización en la estación de Glew para evitar la impunidad. Un centenar, en su mayoría mujeres, acompañadas por organizaciones feministas, sociales y otras cooperativas como las Mariposas de Villa París, Ni Una Menos Almirante Brown, FOL, el FPDS, Polo Obrero, etc. llegaron hasta la entrada de la comisaria ubicada a unas ocho cuadras de la estación. En la puerta se concentraron sus compañeras de trabajo, familiares y vecinos que reclamaban por la "inseguridad" que representaba la institución policial. También reclamaron asistencia a los siete hijos menores que quedaron sin sustento.

Romina, miembro de la Correpi (cordinadora contra la represión institucional) señaló que éste era un caso de gatillo fácil y un femicidio; "El único dato es el que nos dio el comisario y del cual desconfiamos. Ocampo esta detenido en el penal en Florencio Varela y su casa esta custodiada por patrulleros. 

Lo llamativo es que no dejaron declarar a la hija por ser menor, y ella fue un testigo directo. Nosotros estamos a disposición para dar todo nuestro apoyo". Y agregó sobre la actual situación de Ocampo; "No sabemos si la caratula del homicidio será agravado por ser miembro de una Fuerza y por ser un femicidio, también sabemos que los familiares estan siendo amenazados por miembros de la fuerza". Familiares y vecinos confirmaron en diálogo con ANRed que estan recibiendo amenazas de familiares del detenido y anónimos para que no reclamen justicia.

ANRed

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