En los años recientes numerosos casos se ventilaron, algunos de ellos emblemáticos por el descaro con que se han manifestado estos delincuentes sexuales. Un caso emblñemático es el del francés Didier Bourguet.
Al francés Didier Bourguet le resulta difícil recordar a cuántos niños violó sexualmente cuando trabajaba para las Naciones Unidas en la República Democrática del Congo (RDC) en 2004.
‘Yo diría que alrededor de 20, tal vez 25’, es la respuesta de un ex empleado de la ONU en África sobre los niños que abusó durante el desempeño de su función. “No conté”, dijo el ex empleado del organismo, según se lee en un informe del diario británico The Sunday Times, publicado el sábado.
Bourguet ganaba 7000 dólares al mes como jefe de logística en la misión de mantenimiento de paz en la ciudad de Goma y para atraer a los niños de las localidades recurría a los lugareños y prometía a los niños ayuda financiera, señala el informe.
Cuando la Policía congoleña detuvo a Bourguet y las autoridades francesas lo encarcelaron por nueve años en 2008, las Naciones Unidas prometieron ayudar a sus víctimas. Esta promesa nunca se materializó”, se lee en un informe sobre el escándalo sexual del empleado de la ONU en África Didier Bourguet.
Bourguet era parte de la cultura dominante del personal de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que se había acostumbrado a tener relaciones con prostitutas y niños de los países donde prestaba servicios, y ahora, tras más de una década de esos eventos, “esta cultura sigue existiendo”.
En este contexto, una investigación realizada recientemente por el rotativo británico The Guardian reveló que el acoso y los abusos sexuales son muy frecuentes en la ONU, donde reina una cultura del silencio debido a la inefectividad de los entes encargados de investigar este flagelo.
Solo en el primer trimestre de 2018 se han reportado 54 casos de maltrato sexual en el ente a niños y mujeres, mientras que en el último trimestre de 2017 se registraron unos 40 casos, de acuerdo con el portavoz adjunto del organismo, Farhan Haq.
De estos 54 casos de abusos sexuales, 14 ocurrieron en operaciones de mantenimiento de paz y 18 en agencias, fondos y programas.
“Cada acusación relacionada con nuestro personal compromete nuestros valores y principios”, resaltó Haq al respecto el pasado mayo.
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