Me preocupa la intención de las autoridades israelíes de demoler la aldea beduina de Jan Al-Ahmar, una comunidad de 181 personas, más de la mitad de las cuales son niños, dijo Mladenov en un comunicado.
El funcionario instó a Tel Aviv a no proceder con la demolición y cesar los esfuerzos para reubicar a las comunidades palestinas en la ocupada Cisjordania.
Tales acciones son contrarias al derecho internacional y podrían socavar las posibilidades de establecer un Estado palestino viable y contiguo, declaró el representante de Naciones Unidas.
A principios de este mes el Tribunal Supremo de Israel dio luz verde al Ejército para eliminar la aldea palestina y desplazar a sus residentes, allanando el camino para eliminar a más de dos docenas de otras comunidades beduinas cercanas, con el fin de construir un asentamiento que eventualmente cortaría por la mitad a Cisjordania.
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