El barril de crudo West TexasIntermediate (WTI) terminó el lapso en Nueva York en 53,38 dólares, debido al retroceso del 2,3 por ciento en la última jornada y resultados negativos en sesiones previas.
A su vez el petróleo Brent despidió la semana en 61,52 dólares el tonel, lo que supuso también un declive de más de dos por ciento.
Las cotizaciones de ambos tipos de crudos de referencia perdieron en lo que va de mesc erca del 20 por ciento y más del 30 desde sus valores pico reportados a fines de 2017.
En opinión del analista de la firma FXTM, Lukman Otunuga, la semana fue muy difícil para los precios del petróleo, que alcanzaron nuevos mínimos en más de un año debido a la preocupación por una sobreabundancia de crudo y a los temores relativos al crecimiento económico mundial.
Mientras, ante la percepción de un posible crecimiento mayor de la oferta respecto de la demanda,la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) prevé comenzar a reducir el bombeo tras su reunión del 6 de diciembre.
Sobre la abrupta caída de los precios también incidieron los pormenores de la
guerra comercial entre Estados Unidos y China, las dos principales economías y consumidores de petróleo del mundo.
Otros expertos coinciden, entre los factores negativos, la anuencia de Estados Unidos a varios socios comerciales a adquirir petróleo iraní.
Se espera que el 6 de diciembre en Viena, donde está la sede de la OPEP, la agrupación adopte medidas orientadas a incentivar los precios, no obstante las presiones que recibe desde Washington Arabia Saudita-mayor exportador del bloque-, para aumentar su oferta.
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