El coordinador general del Partido Libertad y Refundación (Libre), el ex presidente Manuel Zelaya, aseguró en un discurso que unas 50.000 personas se movilizaron en 156 de los 298 municipios del país para crear los "comandos". La oposición teme un fraude, alegando que el oficialismo controla el Tribunal Supremo Electoral (TSE).
El pasado 29 de julio, Zelaya pidió al TSE que realice una depuración del padrón electoral de cara a los comicios generales del 26 de noviembre. La depuración del padrón contribuirá a "prevenir el gran fraude electoral que se avecina y que la Alianza de Oposición ha denunciado", enfatizó el ex mandatario hondureño.
En las elecciones de noviembre, en las que participarán diez partidos, los hondureños elegirán a un presidente y tres designados (vicepresidentes) de la República, 128 diputados al Parlamento nacional y 20 al Centroamericano, y 298 alcaldes municipales.
El voto con huella digital es la forma de garantizar que no voten los muertos y los migrantes que viven en Estados Unidos" en favor del oficialista Partido Nacional, declaró el periodista hondureño Salvador Nasralla.
El actual presidente, Juan Orlando Hernández, buscará la reelección bajo la bandera del gubernamental Partido Nacional, con la que ganó las elecciones de 2013. Esto ha provocado un descontento en la oposición política porque la Constitución de Honduras no permite esa aspiración bajo ninguna modalidad.
No obstante, un fallo de la Corte Suprema de Justicia de mayo de 2015 dejó abierta la posibilidad de que el presidente pueda buscar ser reelegido.
"El voto con huella digital es la forma de garantizar que no voten los muertos y los migrantes que viven en Estados Unidos" en favor del oficialista Partido Nacional, dijo el periodista hondureño Salvador Nasralla, candidato de la Alianza.
"Estamos convencidos de que hay un fraude montado, hay un millón de hondureños muertos y otro millón de hondureños que vive en Estados Unidos y quieren sacarlos a votar", aseguró con ironía el candidato a diputado Juan Barahona.
