Al hablar en un masivo mitin convocado por su fuerza política, la Organización Revolucionaria Interna de Macedonia-Partido Democrático para la Unidad Nacional de Macedonia (VMRO-DPMNE) afirmó que el crecimiento del PIB del cinco por ciento prometido solo trajo infierno y oscuridad a todos los ciudadanos.
Añadió que el ejecutivo del primer ministro, Zoran Zaev, llevó al país a humillaciones y vejaciones, se dejó arrebatar los intereses nacionales e intenta hacer que los macedonios se vuelvan indiferentes ante todo.
'Pero no lo vamos a permitir- resaltó Mitskoski- porque enfrentaremos uno a uno a todos los ciudadanos, independientemente de nacionalidad y credo, en contra tuya y te mostraremos tu lugar en el lado oscuro de la historia en las próximas elecciones parlamentarias anticipadas o regulares, te venceremos arrolladoramente'.
Anunció que con la protesta de hoy se proclama e inicia una revolución nacional, económica, social y educativa, integral y universal contra el gobierno equivocado de Zaev.
También subrayó que ese movimiento no se ceñirá a la capital, sino que se extenderá a todas las ciudades del país.
Entre las políticas que considera erradas del ejecutivo, el VMRO- DPMNE critica por denigrantes para la identidad nacional las negociaciones con Grecia sobre un nuevo nombre del país, las cuales culminaron en junio con la firma de un acuerdo estableciendo el de República de Macedonia del Norte (Republika Severna Makedonija).
Un referendo celebrado el 30 de septiembre reveló que la mayoría de la población, más de un 65 por ciento, se abstuvo de votar, con lo cual fue derrotado, pero el gobierno siguió adelante con las enmiendas constitucionales vinculadas con ese tema, aún por aprobar.
De acuerdo con la postura oficial, solo con la aceptación del acuerdo se desbrozará el camino para el ingreso de Macedonia a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y el inicio de las negociaciones para el ingreso a la Unión Europea (UE), los dos objetivos básicos que se ha planeado.
Para arengar a la población al respecto, en septiembre desfilaron por Skopje todos los líderes de la OTAN, la UE, Alemania, Austria y altos funcionarios de Estados Unidos, pero el tema está aún pendiente de solución, aparte del rechazo al tratado por importantes fuerzas políticas de la vecina Grecia.
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