El juez Luis Carzoglio resolvió no detener a Pablo Moyano por la "causa Independiente" y apuntó contra las presiones que asegura que recibió por parte del procurador bonaerense, Julio Conte Grand. Ahora, se sumó otro magistrado que avaló los dichos de su colega.
Se trata del juez de Casación Penal bonaerense Victor Violini, quien fue contundente: "Las presiones al Poder Judicial por parte del Poder Ejecutivo de la provincia de Buenos Aires encarnado en la persona de Conte Grand existen y son intolerables".
Violini también opinó sobre la investigación contra y enfatizó que "a todas luces hay una pata política".
Por su parte, Conte Grand respondió a la denuncia de Carzoglio y lanzó una amenaza pública. El procurador aseguró que "el magisrado carecía de la idoneidad suficiente para desempeñarse en su función y por lo tanto se debía avanzarse en el proceso de enjuiciamiento y llegar a una resolución que dispusiese su cesantía".
En diálogo con Radio Con Vos, el funcionario de María Eugenia Vidal insistió: "La otra curiosidad del fallo, que es excepcionalísimo diría, es que un juez de garantías deniegue medidas probatorias".
"El trámite de investigación va a tener dos dimensiones: la administrativa-disciplinaria, y la penal. Vamos a iniciar una causa penal, todos ellos van a tener que ratificar sus denuncias", lanzó en alusión a Carzoglio y Violini.
"Si no la ratifican, el trámite administrativo concluye inmediatamente, pero el penal no. Y como es un eventual delito de acción pública, va a continuar y los van a citar a los tres no en carácter de denunciantes sino de testigos. Tendrán que declarar, tienen que ir por obligación y si no van a ser llevados por la fuerza pública. Y lo que declaren tendrá que ser ratificado porque sino podrán ser incursos en el delito de falso testimonio", completó.
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