El ex jefe de gabinete y asesor del Frente Renovador, Alberto Fernández, sostuvo que de los 21 puntos obtenidos por Sergio Massa en primera vuelta, "nueve van a (Mauricio) Macri, seis van a (Daniel) Scioli y seis son indecisos". Si bien mantiene una relación personal con el candidato presidencial del Frente para la Victoria, ratificó que votará en blanco porque representa la continuidad del proyecto político encabezado por Cristina Kirchner.
En la cumbre del Frente Renovador del Sheraton, Sergio Massa afirmó que "la Argentina necesita un cambio" y algunos medios lo tomaron como un apoyo implícito a Macri. ¿Cuál es la posición del partido?
En verdad en la reunión no se decidió no votar a (Daniel) Scioli sino dejar que la gente vote lo que quiera. Todos los votantes son independientes y autónomos y votan lo que creen conveniente. Después hubo una serie de declaraciones que tomaban distancia del gobierno nacional y admitían la posibilidad que la gente estaba votando un cambio y los medios interpretaron que eso era un apoyo a Cambiemos. Orgánicamente, la fuerza explicó cuáles eran las preocupaciones sobre lo que debía hacer un gobierno futuro y lo transmitió públicamente.
En reiteradas oportunidades se refirió a su amistad con Scioli, ¿por qué votará en blanco en el balotaje?
Tengo una relación de amistad con Scioli que se mantiene más allá de las diferencias política. En las condiciones actuales no veo que nadie me represente. Tengo claramente una posición adversa a la de (Mauricio) Macri, que representa un modelo de política donde las lógicas conservadoras predominan. Estoy hablando en posiciones que ha tomado no sólo en materia económica sino también en ampliación de derechos, donde sus legisladores como Gabriela Michetti votaron en contra de la fertilización asistida y el matrimonio igualitario.
Sin embargo, días atrás dijo que se arrepentía de esa decisión...
Hace bien en arrepentirse porque fue patético. No sé si está verdaderamente arrepentida o es una necesidad que tiene hoy en día para conseguir la adhesión de aquellos que se vieron maltratados. Es incomprensible haberse negado a los tratamientos de fertilización asistida, tienen una visión conservadora de la política que no avalo y me incomoda mucho. Como es lo que ha hecho siempre Macri, no entiendo por qué ahora habría de dejar de hacerlo.
Desde el oficialismo se remarca que en caso de que gane, Macri realizará un ajuste económico. ¿Comparte esta opinión?
El macrismo contesta con verdades pero no contesta lo que va a hacer. Es verdad que el Gobierno es un profundo devaluador pero cuando se le pregunta cómo van a resolver el problema de la moneda se callan y no lo dicen. Plantean que van a levantar el cepo con un Banco Central que tienen las arcas totalmente quebradas y si hacen eso, es que van a devaluar. Si devalúan de un día para el otro, van a generar un formidable empobrecimiento del trabajador. Creen que el dólar tiene que estar a 16 y eso es un tremendo ajuste sobre la gente que vive de los salarios.
¿Por qué no dicen cuál será el ministro de Economía?
Están aplicando la misma lógica que aplicó Menem: si llega a decirnos lo que piensa hacer, va a tener problemas para conseguir votos.
En declaraciones radiales, Felipe Solá dijo que la composición del voto massista es 65% para Macri y 35% para Scioli. ¿Qué expectativas tiene para la segunda vuelta?El dato que tengo d es que de los 21 puntos que sacó Massa, nueve van a Macri, seis van a Scioli y seis son indecisos. De los nueve puntos de indecisos que hay, seis es gente que votó a Massa. Si esos seis terminan con Scioli, la diferencia es casi al revés de la que dijo Felipe.
Dentro del massismo hay un fuerte voto peronista, ¿cuán difícil es para un peronista votar a Macri?
Es muy difícil votarlo a Macri pero también para estos peronistas es muy difícil votarlo a Scioli por eso voto en blanco. Es muy difícil votar a una fuerza política que hasta el día de hoy no abrió juicio contra (Amado) Boudou. Cuando escucho decir a los de Carta Abierta que votan con asco a Scioli, me hubiera encantado que tuvieran ese asco para despreciar a Boudou y (César) Milani.
Recién mencionaba a Carta Abierta, un espacio que siempre dudó de Scioli como el candidato a suceder a Cristina Kirchner. ¿Cree que representa la continuidad del proyecto político?
Hoy Scioli representa eso. Está representando la barbaridad que hicieron ayer (por este miércoles) en Diputados impulsando a Julián Álvarez y al presidente del Banco Nación (Juan Ignacio Forlón) a la Auditoría General tratando de cubrir cargos que ya no les corresponden. Esos actos son enormes arbitrariedades y la gente lo siente así. Cuando veo el silencio de Scioli entiendo que lo está avalando y eso a mí no me gusta.
¿ Lo sucedido en Diputados representa una muestra de retirada del Frente para la Victoria?
No sé si lo hacen como consecuencia derrota o la necesidad de demostrar que hasta el final van a ejercer el poder. Está claro que es muy poco ético porque esos auditores van a revisarse a sí mismos y al gobierno del que fueron parte
Las encuestas previas a las elecciones daban una diferencia holgada de Scioli sobre Macri. ¿Cuál fue el error de la campaña?
El error es que no hay un mensaje para el que no está con Cristina,Cuando vos pescás en tu pecera, no vas a pescar ni uno más de los que están en la pecera. Para ir a pescar al río, tenés que cambiar la carnada entonces siento es que el discurso de Scioli está dirigido exclusivamente a los propios. Es un discurso inepto, insuficiente para convocar al que piensa distinto.
En las últimas semanas Scioli anunció la suba del piso del Impuesto a las Ganancias, el 82% móvil para los jubilados y la baja en retenciones. ¿Cómo lo tomaron?
Son decisiones tardías pero ojalá que lo haga. Para mí no es grato que el espacio político del que fui parte fundadora esté pasando lo que está pasando.
¿Cómo analiza el voto de Cambiemos?
Lo que más me preocupa del voto de Cambiemos es sea básicamente un voto enojado con Cristina. Aunque parte de ese enojo lo comparto, no conduce construir una fuerza de enojados porque cuando la causa del enojo desapareza, empezarán a asomar los problemas reales de la inflación, la moneda, el gasto público. Tienen mucha bronca y hay que tener cuidado porque a veces las salidas del voto de enojo no pueden sostenerse en el tiempo.
¿Qué puntos de contacto tiene con la Alianza?
Quisiera que no se parezca en nada, me preocupa verla a Patricia Bullrich decir que está orgullosa de haber sido parte de ese gobierno. Debería pedir disculpas y no decir que está orgullosa. Lo que me preocupa es que cuando votás sólo por enojo y postergás las discusiones de fondo, hay que ver cómo se ponen de acuerdo porque las posiciones internas son disimiles.
Desde el macrismo se denuncia que hay una campaña del miedo orquestada desde el oficialismo. ¿Qué le parece?
Es una enorme idiotez. Campaña sucia es mentir sobre algo, que Scioli diga que antes Macri decía una cosa y hoy dice otra no es mentir. En vez de decir que es una campaña sucia, debería admitir que ha cambiado y explicarlo. Campaña sucia es que (Elisa) Carrió dijera que Massa es un narcotraficante o que a Scioli lo va a matar La Cámpora para que (Carlos) Zannini sea presidente. Después hay idiotas como en todos lados. Lo que hizo el ministro de Salud (Daniel Gollán) es propio de un imbécil profundo porque no puede utilizar semejante argumento para que la gente vote a Scioli. Se dio cuenta de su imbecilidad y trató de borrarlo pero ya se había difundido.
En caso de que el Frente para la Victoria pierda en el balotaje, ¿Massa podría quedar como el líder del peronismo?
El peronismo se merece un profundo debate sobre qué quiere ser y a quién quiere representar. Ser el líder de este peronismo no le debe dar celos a nadie. Ojalá que Sergio (Massa), que es un político con mucho futuro, pueda proponerlo. Queremos un peronismo de cuadros y que le dé respuestas a los problemas de la gente y no a los poderosos.
*Por Martín Waisman, Política Argentina
