El evento tuvo lugar cerca de Tifariti en presencia de las autoridades del Polisario, representantes del Servicio de Acción contra las Minas de las Naciones Unidas (UNMAS), organizaciones internacionales de desminado y observadores militares de la ONU.
"El Sáhara Occidental está muy contaminado con minas terrestres y restos explosivos de guerra, que ponen en peligro la vida de la población local y su ganado y bloquean el acceso seguro a tierras cultivables y fuentes de agua", dijo Pascal Bongard de Geneva Call, que estuvo presente en la destrucción .
Millones de minas aún están enterradas a lo largo del muro de 2.700 kilómetros que separa el territorio, construido por el ejército marroquí. "Sin embargo, desde la firma de la Escritura de Compromiso, se han despejado decenas de miles de kilómetros cuadrados en áreas controladas por el Frente Polisario, y más de 50,000 refugiados y nómadas han recibido educación sobre el riesgo de las minas", agregó.
Durante un discurso antes de la destrucción, el ex Ministro de Defensa, Mohamed Lamine Bouhali, declaró que el Frente Polisario está cumpliendo su promesa bajo la Escritura de Compromiso de destruir todas las existencias de minas en su posesión, y pidió la eliminación total de las minas y restos explosivos de guerra (REG) en el Sáhara Occidental.
"La firma del Acta de Compromiso por parte del Polisario sacó a la luz el tema de las minas en el Sáhara Occidental y permitió que las organizaciones humanitarias internacionales, como la Cruz Roja, vinieran y brinden apoyo a las víctimas de minas AP, mientras que las organizaciones de desminado pudieron empiecen a despejar la tierra ", dijo Aziz Haidar, presidente de la Asociación Saharaui de Víctimas de las Minas.
Según el Monitor de Minas Terrestres, más de 2.500 personas han sido víctimas de minas AP y REG en el Sahara Occidental desde 1975, y en 2016, se reportaron 34 nuevas víctimas en ambos lados del muro. Marruecos sigue siendo uno de los 34 países que no ha firmado el Tratado de Prohibición de Minas AP.
