Según datos de Naciones Unidas, El Salvador tiene la tasa más alta de muertes violentas de mujeres; el registro de 13.5 por cada 100 mil mujeres, supera casi tres veces la tasa latinoamericana y más de 6 veces la tasa mundial.
Justicia que el Estado no cumple. Cerca del 90 % de esos casos no llega a juicio y de los que son procesados solo uno de cada 10 recibe sentencia condenatoria.
Las activistas mostraron las fotografías de algunas de las mujeres que han sido asesinadas recientemente a la vez que coreaban sus nombres y exigían a la policía y fiscalía a actuar con diligencia en las investigaciones.
Se denunció también que existe una violencia institucional del sistema de justicia, al no garantizarles a las mujeres la debida protección cuando se atreven a denunciar, dejándolas expuestas a un grado mayor de agresión.
