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» » "Impunidad, nunca más"

(05/12/15 - Lomas de Zamora)-.Ese es el lema de la jornada de lucha que se realizará mañana en el centro clandestino de detención Pozo de Banfield. Reclaman que se continúe con los juicios de lesa humanidad más allá del 10 de diciembre.

La organización Hijos Zona Sur realizará mañana “una jornada de reflexión” con bandas de rock locales y muralistas en el ex centro clandestino de detención Pozo de Banfield, para defender la continuidad de los juicios de lesa humanidad.

La coordinadora municipal de Derechos Humanos de Lomas de Zamora, Juana Campero, cuestionó, en diálogo con AUNO, que “el presidente electo (Mauricio Macri) dijo que los derechos humanos son un curro” y aseguró que ”ya hay genocidas pidiendo un impasse a sus juicios hasta después que asuma, el 10 de diciembre”.

“Ninguna organización está dispuesta a dejar esta lucha. Ninguno va a tirar lo que venimos construyendo durante todos estos años”, manifestó la referente de Hijos de Lomas.

El evento comenzará a las 15 en el Pozo de Banfield, ubicado en la esquina de Siciliano y Vernet, y a su vez, se realizarán jornadas en simultaneo en el porteño Parque Centenario y la platense Plaza Moreno, todas en el mismo horario.

Camino Negro, Alquimistas Rock, La Vick band de Tito, Checo Rock ermitaño, Cultura en movimiento, muralistas y poetas serán los artistas que encabezarán la jornada de lucha cuyo lema es #ImpunidadNuncaMás.

“El evento tendrá una feria atípica: no se vende nada ni es un trueque; se exponen cosas que la gente ya no le da uso, y se puede ir y tomarlas. Sirve de alguna manera para aprender a soltar”, explicó Campero.

En cuanto al proceso judicial que se lleva adelante contra los 20 acusados por crímenes de lesa humanidad cometidos en el Pozo de Banfield, Campero manifestó que espera que “el juicio oral sea antes de fin de año, previo a la feria” para adelantarse “a lo que pueda llegar a venir” después del 10 de diciembre, cuando asuma el nuevo gobierno.

El Pozo fue un centro de detención y maternidad clandestino en el que se torturaron a más de 300 personas y desde septiembre de este año se convirtió, tras la lucha de los vecinos y diferentes organizaciones, en un espacio para la memoria.

*Por Nahir Escobio Buono,AUNO

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