“Los asesores militares de Irán en Siria han captado imágenes —fotos y vídeos— de todas las rutas de suministro de crudo de Daesh a Turquía que pueden ser reveladas y divulgadas”, ha anunciado este viernes el secretario del Consejo del Discernimiento del Sistema de la República Islámica de Irán, Mohsen Rezai.
Los asesores militares de Irán en Siria han captado imágenes —fotos y vídeos— de todas las rutas de suministro de crudo de Daesh a Turquía que pueden ser reveladas y divulgadas”, anuncia el secretario del Consejo del Discernimiento del Sistema de la República Islámica de Irán, Mohsen Rezai.
Si Turquía no está al tanto de la compra de crudo al grupo terrorista en su suelo, ha proseguido, Irán está dispuesto a facilitarle todos los documentos que la evidencian.
A continuación, Rezai ha pedido mayor cooperación a los países de la región afectados por la lacra del terrorismo, y ha sugerido disminuir el nivel de confrontación mediante la tranquilidad y la concentración de los esfuerzos en la lucha antiterrorista.
Finalmente, el alto funcionario persa ha expresado su confianza en que muy pronto se hagan públicas noticias sobre la eliminación de Daesh y de los grupos takfiríes de Siria y de Irak.
El exasesor de seguridad nacional de Irak denunció que Turquía compra petróleo a Daesh a 20 dólares por barril, con lo que la banda ha ganado, en los últimos ocho meses, unos 800 millones de dólares.
El Gobierno turco insiste, no obstante, en que no ha comprado nunca petróleo a los takfiríes, y que las fuentes desde las que los turcos reciben el “oro negro” son Rusia, Irán, Azerbaiyán, Irak, Argelia, Catar y Nigeria.
Hay, sin embargo, informes de la asistencia del Gobierno turco a Daesh en múltiples ámbitos, incluidos la movilización de recursos y takfiríes desde Turquía a Siria y viceversa, e incluso el suministro de electricidad.
El jueves, el canciller ruso, Serguei Lavrov, dijo que Moscú presentará a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sus pruebas de que Turquía compra crudo a Daesh.
Las autoridades rusas han acusado en varias ocasiones a Turquía de financiar al grupo EIIL a través de la compra de petróleo. El miércoles, el Ministerio ruso de Defensa presentó pruebas de que el propio presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, así como su familia, se están beneficiando del contrabando de crudo de Daesh.
Las relaciones entre Ankara y Moscú se han crispado tras el derribo por parte del Ejército turco, el pasado 24 de septiembre, de un avión ruso Su-24 que volvía de bombardear posiciones de Daesh en el norte de Siria.
Ankara argumenta que el aparato ruso violó su espacio aéreo, mientras Moscú desmiente esta versión insistiendo en que su nave no entró en territorio turco “ni un solo segundo”, sino que sobrevoló todo el tiempo el territorio de Siria.
El presidente ruso, Vladimir Putin, indicó el lunes que Turquía derribó el avión ruso para proteger el suministro petrolero de Daesh.
