“Ahora hablamos de más de diez mil personas que pasaron desde el inicio de la crisis por los procedimientos de reconciliación y que volvieron al seno de la Patria”, dice Ali Haidar, ministro de Reconciliación Nacional de Siria, en una entrevista con Sputnik News.
En el marco de un proceso ideado por el Gobierno sirio, las personas que se han visto implicadas en seis años de insurgencia en el país árabe podrían formar parte de un programa de rehabilitación en el que se les garantice el retorno a una vida normal.
Una parte de estos excombatientes después de renunciar a las hostilidades, ha ingresado en las filas del Ejército sirio para tomar parte en las operaciones antiterroristas a lo largo del país, ha explicado el funcionario durante la entrevista publicada este jueves.
Por otra parte, Haidar ha cifrado en más de quince mil el número de secuestrados y desaparecidos en Siria. “Muchos de ellos son rehenes del grupo terrorista Yeish al-Islam” interpretado por USA como ‘oposición moderada’, ha apuntado.
Últimamente, el Gobierno del presidente Bashar al-Asad ha llegado a un acuerdo con algunas formaciones armadas, según el cual, los combatientes ‘rebeldes’ deben evacuar, junto con sus familiares, las zonas bajo su control y entregar sus armas ligeras y medianas.
En virtud de este pacto, ciento cincuenta combatientes más sus familiares han abandonado esta misma jornada de jueves localidades de Al-Hameh y Qudsaya, a unos veinte kilómetros al noroeste de Damasco (capital) en dirección a la provincia septentrional de Idlib, han informado medios locales.
“Dentro de próximos días, cerca de 6seiscientos hombres armados abandonarán ambas ciudades, mientras que el resto de milicianos que permanezcan allí, después de deponer las armas, regularizarán su situación legal”, ha comunicado el ministro sirio de Reconciliación Nacional a la agencia estatal SANA.
