El comité de planificación y construcción de Jerusalén ha sometido a votación el proceso de licitación, que se había retirado en septiembre por presiones de EE.UU., según los medios de comunicación israelíes.
Una portavoz de la alcaldía israelí de Al-Quds ha dicho que “los planes en cuestión no son nuevos, el proyecto fue aprobado en noviembre de 2012”, a lo que ha añadido que el plan “se refería a los detalles técnicos para la distribución de la parcela dentro del proyecto”.
La vocera ha asegurado que la administración local seguirá trabajando sobre la base del plan urbanístico de Al-Quds, además de afirmar que el desarrollo de la ciudad beneficiará tanto a los israelíes como a los palestinos.
“Era previsible que lo volvieran a votar. En su momento lo retiraron para evitar una vergüenza política”, ha declarado Bety Herschman, portavoz de la ONG israelí Shalom Ajshav (Paz Ahora), que hace un seguimiento del crecimiento de las colonias ilegales del régimen de Israel.
Más de medio millón de israelíes viven en más de 120 asentamientos ilegales construidos desde la ocupación de los territorios palestinos de Cisjordania y Al-Quds (Jerusalén) en la Guerra de los 6 Días, en 1967.
Las colonias israelíes en los territorios palestinos son consideradas “ilegales” por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Unión Europea (UE) y un gran número de países, ya que la Convención de Ginebra prohíbe construir en tierras ocupadas.
De acuerdo con los datos de la oficina central de estadísticas de Israel, en los primeros seis meses de 2016 se inició la construcción de 1195 viviendas en colonias, un 40 por ciento más que en los seis meses previos, según ha denunciado Paz Ahora.
