“Los resultados de nuestra investigación independiente coinciden con lo determinado por los examinadores médicos, de que la muerte de Freddie Gray fue un homicidio y hay causa probable para presentar acusaciones penales.”
Esas palabras provocaron sorpresa y reacciones de alegría en la ciudad de Baltimore, que esperaba con ansias el pronunciamiento de la fiscalía.
El anuncio llegó en momentos en que se habían anticipado masivas protestas, pidiendo justicia para Freddie Gray y la preparación del aparato policial y de la guardia nacional, que movilizó maquinaria de guerra a la zona más conflictiva de la ciudad, proveyendo otra ola de violencia. Para algunos anunciar la acusación no es suficiente.
Horas después del anuncio, los policías acusados fueron arrestados y miles de personas marcharon por las calles de Baltimore, pidiendo justicia por Freddie Gray. La población latina, se sumó en solidaridad con los afroamericanos.
Muchos aseguran que los severos cargos anunciados han sido diseñados para calmar los exacerbados ánimos de la población y que el desafío será demostrar las acusaciones, para logar un veredicto de culpabilidad.
Las marchas se extendieron hasta altas horas de la noche y muchas personas fueron arrestadas por actos de desobediencia civil desafiando la vigencia del toque de queda.
*Por Alfredo Miranda, Hispan TV, desde Baltimore
