"Con mucho cariño a nombre del presidente Evo (Morales) y nuestros trabajadores petroleros venimos acá a celebrar la instalación número 500.000 de toda Bolivia y lo hacemos en El Alto", afirmó al entregar conexiones en el barrio Tarapacá B del Distrito 8 de esa ciudad aledaña a La Paz.
El Segundo del Ejecutivo boliviano afirmó que con esa cantidad de conexiones domiciliarias, se benefició al menos a 2,5 millones de habitantes.
Proyecciones oficiales estiman que hasta 2020 se prevé instalar más de 1 millón de conexiones en todo el país, incluyendo las instalaciones que se lograrán con el proyecto de Gas Natural Licuado, que permitirá ampliar la cobertura hasta Beni y Pando, regiones de difícil acceso para instalar ductos convencionales.
García Linera precisó que sólo en la ciudad El Alto se instalaron 174.000 conexiones de gas domiciliario con una inversión de más de 173 millones de dólares ejecutados a partir de 2006.
"No se ve (la inversión) porque está bajo tierra, pero si hacemos una radiografía de El Alto es una ciudad de hierro", remarcó al precisar que con esas instalaciones se beneficiaron al menos 870.000 habitantes de esa urbe.
El Vicepresidente boliviano afirmó que el Gobierno continuará invirtiendo en la instalación de redes para el suministro de ese energético hasta alcanzar una cobertura del 100%. García Linera agradeció la lucha valerosa y heroica de la población de esa ciudad, la segunda más poblada de Bolivia, en la denominada Guerra del Gas, en octubre de 2003, cuando los alteños se opusieron a la venta del gas a Estados Unidos.
"El Alto ha defendido (el gas) pero quien produce son estos jóvenes de azul, un uniforme de petrolero, porque representa el gas, representa el petróleo para nuestros querido país", puntualizó en alusión a los trabajadores de la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
Fuente: ABI
