Según los historiadores locales, Hitler sólo vivió las primeras tres semanas de su vida en el inmueble, aún así se registraron a lo largo de los años varios incidentes de personas con ideología antisemita, xenófoba y racista que realizan peregrinajes hacia el lugar para idolatrar al polémico líder nazi.
La casa, utilizada para diferentes funciones, pertenece actualmente a una particular y el estado de Austria paga un alquiler de alrededor de cuatro mil 800 euros desde 1972.
El edificio está vacío desde 2011 debido a que la dueña rechaza todo tipo de ofertas por parte del Gobierno para efectuar la compra del mismo.
“Esta decisión es necesaria porque a la República le gustaría impedir que esta casa se convierta en un sitio de culto para los neonazis, algo que ya ha pasado antes”, indicó el ministro de Interior austríaco, Wolfgang Sobotka.
Además, un portavoz del Ministerio de Interior precisó que el Gobierno ideó una ley para apropiarse del edificio, la cual aún deberá aprobarse ante el Parlamento.
Finalmente, se conoció que pese a los esfuerzos de las instancias gubernamentales de Austria para eliminar la casa del paisaje urbano, la decisión final corresponde a una comisión formada por 12 expertos en política, administración, educación y sociedad civil, indicaron los medios.
Adolf Hitler es considerado el autor intelectual de la muerte de al menos seis millones de judíos durante la Segunda Guerra Mundial (1939-1945), y además el principal catalizador de dicho conflicto bélico, que causó cerca de 60 millones de bajas militares y civiles.
