Quizás la única diferencia radique en que en aquellas elecciones muchos sostienen que el famoso cajón fue acercado por personas ajenas al candidato e incluso al propio partido, mientras que en este caso los clavos del ataud pareciera estar martillándolos con precisión el candidato del PRO.
Tras el insólito festejo debido a que "cada día hay un pibe más preso" del aspirante a senador elegido por Macri, ocurrido después de otros 7 furcios en plena campaña, en el Ejecutivo PRO ya comparan su categoría como candidato a dos históricos dirigentes del peronismo y el radicalismo que ocasionaron duras derrotas electorales. Evalúan cómo "contenerlo".
No fue un error. Tampoco dos. Ni siquiera tres. Es que Esteban Bullrich, el precandidato a senador por la provincia de Buenos Aires que eligió Mauricio Macri, cometió 8 groseros papelones en plena campaña que hoy, a sólo cuatro días de las PASO, generaron que en Cambiemos ya lo comparen con dos dirigentes del peronismo y el radicalismo que provocaron duras derrotas electorales.
"Por ahora sólo fueron peores candidatos Martha Mercader y Herminio", aseguraron fuentes de la Casa Rosada, en referencia a los mencionados exponentes del radicalismo y el peronismo, respectivamente.
Lo cierto es que los bloopers del ex socio político de Ricardo López Murphi parecen ser un excelente argumento para poder aprovecharlo como chivo expiatorio de la fenomenal derrota que casi sin ninguna duda sufrirán en las primarias del próximo domingo.
En el macrismo, de todos modos, tratan de exculpar a Bullrich asegurando que está incómodo porque "está en un lugar donde nunca quiso estar" y que incluso tendrían que haberle hecho coaching para entrevistas, tras los deplorables resultados del ex compañero de Ricardo López Murphy ante los medios.
En ese sentido y según el mismo portal, en el PRO ya tienen organizado un plan de contingencia para cuando el ex ministro se convierta en legislador: "le tiraron a Federico Pinedo, presidente provisional del Senado, con Bullrich".
Los papelones de Bulrich
Sin dudas si se tratara de un candidato de Burundi, Birmania o Letonia nos causaría mucha gracia las grotescas acciones proselitistas de Esteban Bulrich, pero al ser candidato a senador nacional de la fuerza en el gobierno en el principal distrito electoral del país y venir de estar al frente de la cartera educativa no puede menos que preocuparnos.
Sin dudas si se tratara de un candidato de Burundi, Birmania o Letonia nos causaría mucha gracia las grotescas acciones proselitistas de Esteban Bulrich, pero al ser candidato a senador nacional de la fuerza en el gobierno en el principal distrito electoral del país y venir de estar al frente de la cartera educativa no puede menos que preocuparnos.
Desde la interpretación sobre la vida de Ana Frank en Holanda hasta utilizar el #NiUnaMenos para justificar su posición contra el aborto, el precandidato a senador de Cambiemos acumula una serie de declaraciones desafortunadas que le generaron más de un dolor de cabeza al Gobierno.
Esteban Bullrich ha protagonizado varios papelones a lo largo de su actividad como ministro de Educación de Mauricio Macri y luego como precandidato a senador por Cambiemos en la provincia de Buenos Aires.
Una de estas acciones se viralizó en redes y ocurrió cuando durante un acto en Pilar sostuvo que "El corazón no tiene un latido, tiene un cantito: si se puede"
Pero no se puede decir que uno de sus exabruptos es menor que el otro, ya que en Choele Choel no dudo en comparar su gestión al frente del Ministerio de Educación y la gestión de Cambiemos con el terrible genocidio de los pueblos originarios de nuestro sur y señalar que “Esta es la nueva Campaña del Desierto, no con la espada, sino con la educación”.
Pero, como quien no tiene que decir debiera quedarse callado y quien no está preparado para un cargo no debería aceptar una candidatura para él, Bulrich sostuvo que la desocupación puede revertirse. "Un emprendimiento propio que está creciendo mucho en La Matanza, cervecerías artesanales, te parecerá que no crece, pero es uno de los mercados que está creciendo muchísimo en todo el conurbano" sostuvo sin ruborizarse ante la iniciativa PRO para reemplazar al famoso parripollo menemista.
Evidentemente a Bulrich algunos caramelos se le han pegoteado en el frasco, quizás producto de la humedad típica de Buenos Aires durante varios meses del año, por eso realizó una absurda defensa de género para justificar su oposición al aborto al manifestar que "Ni Una Menos también es si hay una beba adentro que Ni Una Menos, no, porque también la estás matando, eso es lo que yo creo por eso es mi posición contra el aborto"
Pero antes, en la génesis de esta cabalgata de estupideces desubicadas, el entonces ministro sumó dos frases que provocaron un llamado de atención dentro del Gobierno. La primera fue cuando afirmó que se presentaba como "gerente de Recursos Humanos". Recordemos que también tuvo gran difusión en redes sociales su discurso sosteniendo que "No me paro acá como ministro, me paro como gerente de Recursos Humanos" y claro, luego, como gerente, negó la paritaria nacional a los docentes.
El ex ministro y ex socio del bulldog López Murphi es realmente un personaje que jamás podrá ser llevado a ficción porque excede lo creíble, tan así que durante una entrevista en Intratables fue consultado sobre la creación de puestos de trabajo y dió una particular respuesta: Pilotos de drones.
La gran incógnita es qué otra ingeniosa ocurrencia tendrá para ofrecernos el resto de la campaña y sobre todo, si efectivamente desde el PRO lo usarán como justificativo por su derrota, que en algunas encuestas dicen puede derivar en paliza si efectivamente quedan detrás del candidato de 1PAÍS y en tercer lugar de la preferencia del electorado.
La gran incógnita es qué otra ingeniosa ocurrencia tendrá para ofrecernos el resto de la campaña y sobre todo, si efectivamente desde el PRO lo usarán como justificativo por su derrota, que en algunas encuestas dicen puede derivar en paliza si efectivamente quedan detrás del candidato de 1PAÍS y en tercer lugar de la preferencia del electorado.
