El secretario general de la ANPDH, Alvaro Leiva señaló que es un adelanto de las investigaciones que serán presentado ante la CIDH. Entre las muertes hay 262 confirmadas y 23 no identificados para un total de 285 fallecidos.
El defensor de los derechos humanos agregó que los otros 23 muertos no han sido idenficados, pero cuentan con fotos y testimonios que corroboran lo ocurrido. Esos casos, explicó, son monitoreados.
Leiva hace una lectura sesgada de los hechos e ignora la realidad que demuestra a través de todo tipo de testimonios periodísticos la existencia de hechos violentos entre los manifestantes y denuncia la existencia de un estado de sitio impuesto por fuerzas de choque afines al gobierno.
Existe un estado de sitio no declarado” que ha sido impuesto por “grupos paramilitares y de choque”, dijo Leiva, quien omite deliberadamente señalar que los sectores que realizan estas acciones pertenecen a sectores no identificados de civiles armados..
El dirigente humanitario, que casi todo el tiempo hace hincapié en las acciones defensivas del gobierno constitucional de Nicaragua precisó además que “existe un uso desmedido de armas de fuego” por parte de la Policía Nacional, “hay armas de alto calibre de guerra, especialistas francotiradores” que disparan contra los pobladores, criticó Leiva.
Nicaragua sufre una crisis que mantiene con barricadas diferentes barrios de Managua, así como tranques en varios municipios.
La inseguridad, por otro lado, se ha incrementado en el país, puesto que encapuchados que se movilizan en camionetas y motocicletas disparan a matar, tanto en Managua como en los departamentos.Por tal motivo, en Managua los pobladores no salen por las noches, para evitar a los encapuchados que circulan armados y que ya han madato al menos a diez personas.
Para Leiva, en Nicaragua existe un abuso de las personas con armas de fuego, aunque evita sutilmente expresar que, al igual que ocurrió antes en Venezuela, grupos de terroristas armados, presuntamente financiados por la CIA aplican acciones de terror sobre la población civil.
“Existe un uso desmedido de armas de fuego” por parte de la Policía Nacional, “hay armas de alto calibre de guerra, especialistas francotiradores” que disparan contra los pobladores, fue lo único que atinó a decir Leiva, sin referirse a la obvia pertenencia de los terroristas a las filas opositoras.
Este martes cumplieron 70 días desde que comenzaron las protestas en Nicaragua el pasado 18 de abril en una zona céntrica de Managua. El defensor de los derechos humanos llamó a un urgente cese de hostilidades en Nicaragua.
