(05/11/15 - Inglaterra)-.El líder del Partido Laborista (PL) británico, Jeremy Corbyn, cuestionó la permanencia de su país en la denominada coalición anti-EIIL que ataca supuestas posiciones de EIIL (Daesh, en árabe) en Irak.En declaraciones concedidas el martes a ITN News, Corbyn indicó que su país debe revisar su decisión de atacar a Daesh en Irak, porque los ataques realizados desde septiembre de 2014 por la denominada coalición anti-EIIL, liderada por Washington contra los extremistas takfiríes, no han producido resultados positivos.
No estoy seguro de hasta qué punto esos (bombardeos) han tenido éxito (…) Lo que se ha hecho en Irak lo ha hecho el Gobierno iraquí, ahora apoyado por el Gobierno británico”, dice el líder del Partido Laborista (PL) británico, Jeremy Corbyn.
“No estoy seguro de hasta qué punto esos (bombardeos) han tenido éxito (…) Lo que se ha hecho en Irak lo ha hecho el Gobierno iraquí, ahora apoyado por el Gobierno británico”, indicó Corbyn.
Tras cuestionar la utilidad de los ataques aéreos de esa coalición, supuestamente dirigidos contra los terroristas, el político británico añadió que la implicación de los poderes regionales y el uso de herramientas políticas podrían contribuir a encontrar una solución a la crisis de Irak y Siria.
Refiriéndose a los diálogos internacionales sobre Siria mantenidos el pasado 30 de octubre en Viena (Austria), Corbyn destacó además que Irán hubiera debido formar parte de esas conversaciones desde el principio. La del 30 de octubre fue la primera vez en que Teherán fue invitada a una reunión celebrada a nivel internacional sobre Siria.
El líder del PL expresó también su esperanza de que la presencia de Irán entre los poderes mundiales ayude a encontrar pronto una solucionar para la crisis.
El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry y el canciller ruso, Serguei Lavrov, hablan durante los diálogos internacionales sobre la crisis de Siria en Viena, capital austriaca. 30 de octubre de 2015.
El pasado 1 de julio, el ministro británico de Defensa, Michael Fallon, pidió a la Cámara de los Comunes que adoptara las medidas pertinentes para que el Gobierno de Londres forme parte de la coalición encabezada por EE.UU., creada supuestamente para bombardear las posiciones de Daesh en Irak y Siria.
Doce días después, el primer ministro David Cameron anunció que el Reino Unido aumentaría el presupuesto de su lucha contra los takfiríes de Daesh.
No obstante, tanto el Gobierno de Irak como el de Siria cuestionan la efectividad de dichos bombardeos y critican a dicha coalición por los daños estructurales que ha generado en las infraestructuras de Siria.
El pasado 3 de agosto, la organización de periodistas independientes Airwars anunció, en un informe de 35 páginas, la muerte de 459 civiles en las operaciones aéreas de la referida coalición en Siria e Irak.
Y el opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH), con sede en Londres, capital británica, contó la muerte de 200 civiles sirios desde el 23 de agosto de 2014 —fecha de inicio de los ataques de la coalición a Siria— hasta el 23 de agosto de 2015.
