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» » Una esquina de Resistencia llevará el nombre de Noemí Esther Giannetti de Molfino

(10/06/16 - Derechos Humanos)-.Una esquina de la capital chaqueña llevará el nombre de "Noemí Esther Giannetti de Molfino". 

El reconocimiento público a la militante peronista se realizará mañana 11 de junio a las 11 horas, en la intersección de las calles Juan B. Justo y Roque Sáenz Peña. 

Se colocará una baldosa alusiva frente al que fuera su domicilio y el descubrimiento de una escultura de Mimo Eidman. Del acto participarán los familiares de Noemí y el intendente de Resistencia, Jorge Capitanich. 

El reconocimiento público se concretará en función a la ordenanza municipal impulsada por la ex concejal, Clarisse Pasmanter en 2014.

Noemí Esther Giannetti de Molfino, nació en Saladillo, Provincia de Buenos Aires y se radicó en Resistencia en 1951 junto a su marido, José Adán, y a sus hijos Miguel Ángel, Alejandra, Marcela, Liliana y José Alberto. 

En 1961 nació su sexto hijo, Gustavo. Quedó viuda en 1963 a la edad de 31 años. Trabajó y se puso en la tarea de criar a seis niños pequeños. Con el paso de los años, a fines de los '60, sus hijos mayores fueron tomando contacto con la política y empezaron a militar con distintos grados de compromiso, tanto en el PRT-ERP como en el Peronismo de Base y en Montoneros.

Hacia 1974, dos de los hijos de Noemí pasaron a la clandestinidad. En 1976, detuvieron a la segunda de sus hijas, Alejandra. A partir de allí, la madre arriesgó todo, hasta su vida, por acompañar y cubrir a sus hijos.

En 1978 viajó a Europa junto a su hija Alejandra, que había podido utilizar la denominada opción para dejar el país. En 1979, su hija Marcela y su compañero Guillermo Amarilla fueron secuestrados en Buenos Aires al reingresar en el contexto de la llamada Contraofensiva Montonera. Noemí redobló entonces su militancia por los DDHH, siempre en Europa. Es considerada una "Madre de Plaza de Mayo en el exilio".

En 1980, Noemí Esther fue secuestrada en Lima, Perú, junto a un grupo de exiliados argentinos, en el marco de la Operación Cóndor. Estuvo desaparecida durante un mes y reapareció asesinada misteriosamente en Madrid. Documentos prueban que fue secuestrada y asesinada por un Grupo de Tareas del Ejército Argentino enviado por la dictadura que gobernaba la Argentina. Tenía 55 años.

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