Desde la entrada al poblado, el cual forma parte de la comunidad de Villa Milpa Alta, se percibe el rechazo de la gente al nuevo proyecto, anunciado por decreto presidencial el pasado 8 de octubre sin aviso previo, pese a que se trata de un pueblo originario de usos y costumbres donde la asamblea comunal es la máxima autoridad y toma las decisiones.
En puertas y ventanas, de construcciones consolidadas a medio terminar o casas de lámina de asbesto, colocaron carteles en los que se lee: "No a la base naval", "No a la entrada de la Marina", "Xicomulco no será cuartel" y hoy se realizó una protesta para manifestar el descontento.
El pueblo no está solo, al rechazo se ha unido la representación de Bienes Comunales de Milpa Alta, integrada por los nueve pueblos de la demarcación, quienes alertaron que la unidad militar que se pretende instalar, en un terreno de más de 7 mil metros cuadrados localizado en el número 324 de la avenida 5 de mayo, facilitará el proyecto Arco Sur, que pasaría a 500 metros de la tierra comunal dañando importantes ecosistemas naturales y ello abriría las puertas al desarrollo urbano en tierras de conservación natural.
Los pobladores aseguraron que la base naval no pasara.
*Por Josefina Quintero, La Jornada, México
