Inicialmente, los ataques se concentraron en los barrios de Al Furqan, Al Fayed y Al Midan, así como en los dormitorios estudiantiles de la Universidad de Alepo. Más tarde, sufrieron el bombardeo las zonas próximas a la intendencia, según fuentes policiales.
La agencia siria informó además que bombardeos del Ejército del Islam, una organización que Damasco considera terrorista, mataron a dos personas e hirieron a siete en el barrio de Harasta, en los alrededores de Damasco.
Entretanto, el gobierno sirio mantiene su ofensiva para cercar por completo las áreas en poder de los rebeldes, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), una ONG opositora que transmite desde Londres citando una red de informantes en el terreno, que dió cifras similares de muertos.
Las fuerzas sirias, según las fuentes, se encuentran ahora a entre 500 y 1000 metros del camino de Castello, la única conexión terrestre restante entre la zona controlada por los yihadistas y el resto del mundo.
Dentro de la zona de Alepo que controlan los rebeldes, afirma el OSDH, hay entre 250.000 y 300.000 personas, señaló Europa Press.
Según el Observatorio, los ataques aéreos del gobierno y fuertes bombardeos del ejército nacional provocaron al menos cinco muertos en la zona bajo control de los rebeldes.
