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» » “Este es un gobierno de derecha y fascista”

(29/04/16 - Derechos Humanos)-.Nora Cortiñas, referente indiscutida de las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, se presenta como la mamá de Carlos Gustavo, su hijo desaparecido el 15 de abril 1977. “Hasta ahora no supe absolutamente nada de lo que pasó con él”, dice con una fortaleza que desmiente su diminuto cuerpo.

Con la misma entereza con la que desde hace casi 40 años lleva adelante su lucha, la lucha de las madres y de toda una sociedad, habla de la realidad de nuestro país y de la necesidad de defender lo logrado durante los últimos años.

¿Cómo ves la situación en cuanto a los derechos humanos?
En los años que pasaron tuvimos cosas positivas. El logro que rescato con mayor fuerza son los juicios a los genocidas, porque era una cosa que hace 30 años hubiera pensado que era imposible; verlos sentados en el banquillo de los acusados y que tuvieran que responder por ese pasado terrorista que nos hicieron vivir (desapariciones, muerte, tortura, robo de bebés). 

Pero desde que asumió el gobierno de Macri mostró que los derechos humanos no le interesan. No le interesaron antes y no le interesan ahora. Empezó destruyendo todos los espacios dedicados a los derechos humanos, a la Memoria, la Verdad y la Justicia. Lugares específicos que hacían la investigación para llevar a los jueces y a los abogados el aporte para estos juicios y todos los espacios de apoyo a las víctimas, a los testigos. Demostró que realmente no le interesa para nada el camino hacia terminar con la impunidad en nuestro país.

Nosotros tenemos el lastre de un Terrorismo de Estado como nunca se había dado en nuestro país, con 30.000 o más detenidos desaparecidos, miles y miles de presos políticos, de exiliados, y todavía estamos en la búsqueda de los jóvenes que fueron apropiados cuando eran bebés.

¿Sentís que hay otros derechos vulnerados en este nuevo escenario?

En este momento hay un desfasaje total de lo que fue la defensa a los derechos humanos. No hay derecho tampoco al respeto al trabajo, a la ciudadanía, al pueblo, de ejercer sus derechos; inclusive de trabajo. 

Los centenares de despidos muestran que tampoco hay ni siquiera un respeto porque la excusa de la palabra esta “ñoqui”, que siempre sobrevoló nuestro país en cada cambio de gobierno, pero acá no es cuestión de ñoquis, están despidiendo profesionales, gente con experiencia y el gobierno este no tiene ningún plantel de gente preparada para sustituir a la gente que están echando. O sea que están devastando todos lugares de trabajo que son importantísimos para el desarrollo den nuestro país.

¿Tuvieron contacto con las autoridades del nuevo Gobierno?
Un grupo de organismos pidió una entrevista con el nuevo gobierno pero yo no fui. Estuve con el director de derechos humanos a nivel nacional, junto con todos los organismos que quisieron estar en esa reunión y junto con el ministro de Justicia. Ellos escucharon y nosotros escuchamos. Se llevó también un documento y fue la apertura de una nueva etapa.

¿Cómo es el vínculo en Morón?
El director de Derechos Humanos que puso el intendente me llamó para presentarse, me pareció muy correcto. En este momento lo que se está discutiendo es que puedan seguir actuando los organismos de derechos humanos y las agrupaciones que trabajamos siempre juntos para ver cómo se puede conciliar el uso de la Mansión Seré.

Reconocemos que fue el gobierno de Martín  Sabbatella quien acondicionó ese espacio y trabajó para el desarrollo de lo que es la Memoria, la Verdad y la Justicia en el lugar. Siempre fueron muchos colegios y vecinos y se ha trabajado muy bien, entonces ahora vamos a ver cómo se puede hacer.

¿Sentís que hubo un avance o un retroceso?
Este presidente que ganó, tiene las tres jurisdicciones: Nación, Ciudad y Provincia. Es la suma de un poder para manejar los derechos humanos que hace ya muchos años se entiende como todos los derechos humanos: trabajo, educación, salud, etc., todos unidos. Y ahora hay que ver cómo se encamina, sobre todo la Provincia que ha quedado maltrecha. Y en cuanto a nivel nacional son los derechos que vamos a seguir defendiendo y vamos a hacer hincapié en que en la Argentina no se puede volver atrás. En estos 100 días hemos hecho un retroceso muy fuerte.

¿Lo pendiente del proyecto anterior, creés que se logra por el camino que propone el nuevo gobierno?
Hace poco hubo una reunión de organismos de todas las provincias por el tema de los juicios. No se están anulando, pero no hay presupuesto para que sigan. Si el gobierno a nivel nacional no mantiene un presupuesto y da el ejemplo a las provincias, entonces se terminan los juicios. Yo creo que si nosotros enfrentamos una dictadura cívico militar eclesiástica y sufrimos mucho pero logramos que se terminara, y en los años de la dictadura tuvimos solidaridad de muchas organizaciones  internacionales, ahora tendremos otra vez que golpear puertas. Pero no vamos a parar, no queremos vivir con la impunidad de los crímenes horrendos que se cometieron, de ninguna manera.

Dentro del gobierno hay gente que también piensa como nosotros, es cuestión de que tengamos diálogo, para todo. Yo soy independiente desde que salí a la calle hace 40 años -y sigo siendo-,  pero soy crítica de lo que se hace mal en el país. Y los que no les gustaba mis críticas y ahora me entienden bienvenidos, que salgan a la calle, que se arrimen y vayamos todos juntos.

En el ámbito de los derechos humanos cada organismo tiene su declaración de principios. Nosotros definimos de entrada que no íbamos a participar de ningún partido político. No así otros organismos. Adentro de las Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora siempre hubo un ejercicio de respeto y de democracia, siempre hubo un respeto por quienes querían participar en partidos políticos. Yo me siento tranquila y conforme con las cosas que critiqué y he podido ejercer mi derecho democrático a criticar.

Las Madres están presentes defendiendo muchas luchas, ¿sentís que a veces están un poco solas?
Eso a veces es así. Yo ayer estuve en el obelisco en la carpa villera y después en la Legislatura en una mesa sobre los tres años de la masacre que hizo Macri en el Hospital Borda. Eso fue terrible, no tiene disculpa, no hay motivo para haber hecho eso, el espacio destrozado. Ahí Macri, Vidal y Larreta tienen todas las responsabilidad, y muy graves. Además que salió gente herida, hay trabajadores procesados y la Policía Metropolitana nada. Esas injusticias no se pueden pasas por alto. 

La señora Vidal estaba en el gobierno de la Ciudad y dio órdenes. Lo que pasa hoy en el Borda da muestras de un problema social y económico muy grave con gente incluso que si le dan el alta no tiene adónde ir. Lo mismo en el Moyano y el Tobar García. Ningún gobierno se ocupó nunca de estas cosas. En estos lugares la gente joven que trabaja solidariamente es extraordinaria.

También me preocupa la lucha por el medio ambiente; el tema de la explotación de las tierras sin rendir cuentas de empresas como Chevron, Barrick Gold, Monsanto, y lo otro es mi resistencia al maltrato a las comunidades indígenas de nuestro país que pasan mil necesidades.

¿Ves algún tipo de disociación entre las cosas que pasan y las responsabilidades políticas de quienes gobiernan?
Yo digo que la lucha continúa, acá no se pueden bajar los brazos y hay que estar atentos para que justamente eso no suceda. Lo mismo con la trata de personas y el abandono de los niños. 

En la Provincia se cerraron lugares que trabajan con niños muy necesitados, además se les deben los sueldos a los trabajadores. En la Villa Fátima han hecho un lugar para atención al barrio con profesores y maestras para sacar a los chicos de la calle y el gobierno de Macri les sacó todo el apoyo, no les pagan más sueldos. Y la gente que tiene responsabilidad sigue trabajando y han sido realmente maltratados. Por todo esto hay que luchar.

En algunos casos como el de Evo tomaste una postura y lo defendiste. ¿Cómo ves la región hoy en ese sentido?
Bueno, a mí me preocupa lo que está pasando en Brasil y en Venezuela. A Evo se le hace difícil porque el pueblo no recuerda de donde los sacó Evo, un país fundido totalmente. Evo hizo que las riquezas sean para el pueblo. Lo de Brasil es preocupante porque es un país grande, es el eje de América del Sur. Y me preocupa muchísimo en Argentina, la Justicia. La persecución a los jóvenes. Matan a un chico en la comisaría y dicen que se ahorca. Y los policías quedan libres. Quisiera que hubiera una Corte Suprema de Justicia que pusiera los ojos en el pueblo. Todo eso es lo que tenemos que tener claro para luchar por eso.

¿Tenés alguna posición tomada sobre lo que está pasando con Milagro Sala?
Desde el primer momento sostengo que fue inconstitucional su detención y la inconstitucionalidad de tenerla detenida todavía. Ahora dicen que va a empezar un juicio, una causa que tenían que meterle, no tienen las pruebas siquiera para acusarla. 

Entonces me tiene preocupada porque si hay una muestra de que la Constitución no es respetada sienta un precedente peligroso. Fue inconstitucional y fue inmoral el modo de detenerla y se mantiene en el tiempo.

¿Cómo te imaginas a tu hijo hoy, qué pensaría él?
Ayer fui a la reunión de la carpa villera y yo les dije: “Mi hijo empezó a militar en la villa 31 y ahora estaría ahí”. A veces me dicen que sería de este partido o de aquel, yo les digo no sé de qué partido, pero mi hijo sería militante político. Hasta que se lo llevaron fue un militante político y estaba muy orgulloso, entonces ahora hubiera sido lo mismo.

Vos hablabas de un retroceso en derechos humanos desde la asunción de este gobierno ¿Qué opinas de las declaraciones de Lopérfido?
Yo tengo una sola palabra: es un imbécil. Querer desprestigiar la lucha por los derechos humanos lo descalifica a él. Y quedó descalificado para siempre. Acá hubo juicios, condenas, comprobación de crímenes horrendos. Es un pobre imbécil.

El gobierno de Tagliaferro incorporó a la gestión de Morón a dos familiares de Videla, ¿qué opinión te merece?
Es un gobierno de derecha y fascista. Eso demuestra lo que te decía. Al gobierno y a Macri los derechos humanos, el respeto por la democracia y la Constitución no le importan. Es un gobierno de derecha y fascista. 

A nosotros estos 40 años no nos fue nada fácil; porque si bien desde el 2003 cambió bastante, si cuando ganó Alfonsín hubiera ganado Luder yo creo que no hubiera existido juicio a las juntas. 

Yo nunca fui radical pero rescato de Alfonsín la fuerza para decir “acá va a haber juicio” cuando las armas todavía estaban calientes. Después se mandaron todas las que sabemos. Pero con el gobierno actual está claro que es un gobierno de derecha y con tintes fascistas. Hay que salir a hacer las denuncias estas, no quedarse en que “es lo que tenemos”. 

No queremos que vuelvan más las botas, queremos seguir votando y todo lo que quiera volver será denunciado y rechazado. La gente tiene que estar unida para rescatar los logros que tuvimos y para luchar por lo que falta.

Entrevista: El Catus, NdO
Fotografía: Hugo Delgado

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