"Qué mejor lugar que este para presentar una maqueta que explica el funcionamiento de la ruta. A 102 años de su inauguración, y ahora en manos panameñas, el Canal no solo se expande, sino que lo hace asumiendo el reto de ser responsable con el medio ambiente", afirmó el administrador de esta vía interoceánica, Jorge Luis Quijano.
Agregó que al ser más corta la ruta, los buques requieren de menos consumo de combustible para su recorrido, lo cual la hace más amigable con el ambiente, de ahí el calificativo de verde.
De igual forma, aclaró que las nuevas esclusas de Cocolí (Pacífico) y Agua Clara (Atlántico) cuentan con tinas para la reutilización del agua, lo que disminuye el consumo del vital líquido.
A través de sus salas de exhibición los visitantes descubren cómo Panamá cambió el mundo y los retos que representa para la nación istmeña el cambio climático, expresó el director del Biomuseo, Jorge Sánchez.
El alto ejecutivo aseguró que la entidad se enorgullece de celebrar la ampliación, a partir de la presentación de este histórico logro tecnológico en el marco de nuestra historia natural.
La maqueta es una réplica de las esclusas de Pedro Miguel, Miraflores y las nuevas de Cocolí, que mide seis metros de largo y 2,4 de ancho.
El domingo 26 de junio el buque chino Cosco Shipping Panamá comenzará su recorrido inaugural en la esclusa de Agua Clara, Colón, a las 06:00 (hora local), donde se prevé que en cerca de tres horas haga el tránsito del primer tramo de su viaje interoceánico.
Luego se dirigirá al lago Gatún y seguirá por el llamado Corte Culebra, para a través del nuevo canal de aproximación arribar a las 15:00 (hora local) a la esclusa de Cocolí, en el Pacífico, donde será la ceremonia central.
El megaproyecto de la ampliación, considerado por especialistas uno de los más complejos de su tipo en el mundo, consiste en facilitar el cruce de naves cuyas dimensiones les permiten transportar hasta 13 mil TEU’s (contenedores de 20 pies), 2,6 veces más que las actuales que transitan esa ruta.
La originalidad tecnológica del Canal de Panamá lo llevó a figurar entre las siete maravillas de la ingeniería civil mundial, un reconocimiento al resultado de quienes desde hace más de una centuria hacen subir y bajar los buques hasta o desde el Lago Gatún.
