La acusación imputaba a Nero, de raza blanca y de 30 años, un delito de lesiones intencionadas, imprudencia temeraria y dos cargos de mala conducta por el incidente que acabó con la vida de Gray a resultas de heridas en la médula espinal producidas por la manera en que fue transportado a la comisaría en la localidad del noreste estadounidense.
La muerte de Gray provocó manifestaciones multitudinarias el año pasado, dentro del amplio movimiento de protesta contra la violencia policial, en especial de carácter racista antinegra, conocido como “Las vidas negras importan”.
Nero es el segundo agente en ser juzgado, tras un primer juicio que fue anulado en diciembre pasado por falta de acuerdo en el jurado. El tercer juicio, previsto para el 6 de junio, es el de Cesar Goodson, el conductor del furgón policial que trasladó a Gray.
