Publicado por: Redacción
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Sociedad
(01/10/18 - Pueblos originarios)-."El domingo 23 de septiembre recibimos el Nuevo Tiempo Guaraní en Punta Querandí. En un contexto marcado por diversos juicios que ponen en peligro a la comunidad, más de un centenar de personas confluyeron en la ceremonia del Ara Pyahu en nuestro Opy."
“Los quiero felicitar por ser los guardianes de los que ya no pueden hablar, de los que ya no pueden defenderse, ustedes lograron ser sus voces, sus manos, su cuerpo, su espíritu. Y lo más importante: pudieron descifrar el mensaje de aquellos ancestros y también tomaron la posta”, expresó Roxana Mariguan, trabajadora de la educación y miembro del Pueblo Mapuche.
Amanecía la comunidad y comenzaban los preparativos para la gran celebración. Cerca de las 10 de las mañanas el arroyo Garín vibraría una y otra vez con el va y viene del bote cruzando a todos los que se iban acercando al lugar. Se oían saludos, había abrazos, reencuentros, charlas, risas, manos convidando mates, manos cocinando comida guaraní en comunitario, manos avivando el fuego, manos reahogando cebolla, manos haciendo tortafrita, manos cocinando galletas dulces en el horno de barro.
También se escuchaban historias, anécdotas, novedades, se compartía el canto junto con las tacuapú y mbaracas sonando.
Y así en este clima de hermandad llegó el mediodía, nos reunimos todos en un gran círculo y la comunidad dio la bienvenida donde se explicó la importancia de la ceremonia, se agradeció la presencia de todos y cada uno de los presentes y se comentó lo compartido la semana anterior en la audiencia con los testigos en uno de los juicios de desalojo, siendo conscientes que estamos comenzando a transitar la etapa final del juicio que atenta el derecho a nuestro territorio y a nuestra vida comunitaria.
Se hicieron las 13 horas y llegó el gran momento, guiados por nuestros abuelos Gladys y Reinaldo nos dirigimos hacia el Opy donde nos esperaba un gran círculo de flores y por segunda vez en el 2018 el Templo Guaraní estaría abierto, siendo un portal de conexión con nuestra espiritualidad tan negada durante tanto tiempo por quienes quienes quieren invisibilidad nuestra raíz, nuestra cultura y resistencia.
Enlazados una vez más en círculo, los abuelos dieron comienzo a la ceremonia y nos sahumaron para armonizarnos y recibir fortalecidos este nuevo tiempo. Luego, con los rayos del sol asomándose por el bosque, nos anunciaron el nombre originario que se le dio a una niña de la comunidad y con gran alegría y emoción celebramos a Yeruti. En ella la fortaleza de los ancestros y el amor de toda la comunidad. Sonaron las mbaracas y las tacuapu acompañando un canto guaraní que compartimos todos haciendo vibrar la tierra y dando cierre a la ceremonia.
Los hermanos del Ayllu Sartañani guiaron a los invitados compartiendo su música sikuri hasta las puertas del Salón Comunitario Cacique Manuá donde ya estaba todo listo para disfrutar una rica comida guaraní. Se brindó el almuerzo y se dio inicio al festival con distintos músicos, dúos, conjuntos y oradores que expresaron su apoyo a Punta Querandí.
Un agradecimiento muy especial para los músicos: Guillermo Meona Morales y Andrea Cervantes que despertaron los primeros bailes, los hermanos y hermanas del Ayllu Sartañani, la juventud isleña de la “Guerrilla Cósmica” y el Trío de Río de Campana. Y una mención de honor para el Colectivo Cultural de Maschwitz, que aportaron los equipos de sonido.
Bajó el sol y una suave guitarreada de fogón musicalizó los saludos y la retirada de todos los que se acercaron a ser parte de este día de fortalecimiento, celebración y reivindicación de la cultura y prácticas espirituales de nuestro territorio.
Voces en el Micrófono
Las primeras en trasmitir algunas palabras fueron las trabajadoras de la educación y miembros de pueblos originarios Roxana Mariguan (mapuche), Mayra Juárez (kolla-guaraní) y Daniela Paniagua (guaraní). “Gracias Punta Querandí por darnos el espacio para poder dar el mensaje desde nuestra perspectiva de docente indígena”, señaló Mariguan, perteneciente a la Lof Vicente Catrunao Pincén.
“Quisiera agradecer la invitación a celebrar su año nuevo y felicitarlos por su gran progreso en estos años, quedé sorprendida por la Biblioteca, por el espacio sagrado (el Opy), por esa gran estatua del yaguareté, por sus talleres y por mil cosas más”, agregó Roxana.
Sin embargo, la mujer eligió resaltar otro aspecto: “Algo que quiero destacar y felicitar muchísimo más, es por ser los guardianes de los que ya no pueden hablar, de los que ya no pueden defenderse, ustedes lograron ser sus voces, sus manos, su cuerpo, su espíritu. Y lo más importante: pudieron descifrar el mensaje de aquellos ancestros y no solamente descifrarlos sino que también tomaron la posta. Por todo eso yo estoy segura que el Universo les dará lo que ustedes necesiten. Muchísimas gracias por la invitación y Marici Weu!”.
El referente mapuche Nilo Cayuqueo también tomó el micrófono para resaltar que la existencia de Punta Querandí es conocida en todos lados, incluso a nivel internacional aseguró el dirigente de longeva trayectoria, quien suele frecuentar instancias internacionales como las reuniones por los derechos de los Pueblos Indígenas en Naciones Unidas.
Otras voces fueron las de Darío ‘Chavuku’ Juárez y Gladis ‘Jesy Rendy’ Roa del Pueblo Guaraní, quienes recordaron la primera fiesta del Ara Pyahu que tuvo lugar en Punta Querandí en 2012 y cómo ha ido creciendo esta celebración con los años.
“El Ara Pyahu es un tiempo donde se renueva la naturaleza, las personas, el aire, el agua. Esa renovación también está en las ganas, en los deseos, en los proyectos, las inquietudes, en las ganas de seguir construyendo cultura e identidad”, señaló Darío, quien actualmente se encuentra estudiando para ser maestro de primaria. Y agregó: “Punta Querandí se transformó en un lugar donde esa renovación ocurre todo el tiempo: personas que vienen, se acercan para conocer y en muchas oportunidades se encuentran con su propia cultura. Por eso es el lugar perfecto para llevar adelante este comienzo de nuevo ciclo guaraní”.
Rubén Ifran, vocero de la Comunidad Guaraní “El Tabacal” del Departamento Orán (Salta), mencionó diversas luchas de los pueblos originarios a nivel nacional contra grandes corporaciones como Benetton en la Patagonia y la multinacional Seaboard, dueña del Ingeniero San Martín del Tabacal en el norte argentino.
“La jornada fue hermosa, por primera vez pude compartir en Punta Querandí el año nuevo mbya guaraní y de esta manera pude acercarme a la lucha que vienen llevando adelante los hermanos y transmitirles el abrazo fraterno que les enviaron desde Salta la Comunidad Guaraní El Tabacal y la Comunidad Iguopeigenda Río Blanco Banda Sur. Entre todos resaltamos la importancia de las luchas de nuestros pueblos también en el conurbano bonaerense”, expresó Rubén Ifran.
Rosario Haddad, investigadora de cantos tradicionales de los pueblos originarios, compartió la palabra junto a una compañera del Colectivo de Abogadxs Populares La Ciega. “Muchas gracias por darme un espacio durante el festival para hablar de la Etnomusicología y como la música atraviesa lo cotidiano y es también un lugar de resistencia” , manifestó.
La nutrida delegación proveniente de Pilar tuvo una amplia participación en el acto. Por un lado, los compañeros y compañeras de la Biblioteca Palabras del Alma. A su vez, Graciela Capodoglio de la Reserva Natural de Pilar. Y Osvaldo Martínez, conocido activista de los derechos humanos y compañero de militancia de Ana María Martínez, secuestrada por la dictadura en 1982 y hallada muerta en Punta Querandí en febrero de ese año, motivo por el cual, en marzo de 2014, se levantó un monolito en su memoria en nuestro territorio comunitario.
“No es casualidad que la encontraron ahí a la compañera, regó con su sangre la tierra de Punta Querandí”, señaló Osvaldo Martinez, de la Comisión de Derechos Humanos de Campo de Mayo. Y relató: “Me saqué una puñalada que tenía clavada, siempre quise conocer el lugar y no me animaba, cuando llegué sentí una paz tremenda y después pasé un lindo rato con todos, con alegría”.
También dirigieron algunas palabras la educadora y escritora Laura Szmuch, y la vecina isleña Adriana Koppmann, quien vino acompañada por una decena de sus vecinos y habló sobre la Cumbre del Agua que tuvo lugar en Catamarca hace algunos días.
La fortaleza es el Camino de las Ancestros
(Por Jésica Zalazar)-.La llegada del Ara Pyahu nos dejó una gran fuerza. Estamos atravesados por la etapa final del juicio y todo apoyo en esta instancia se siente y se agradece el doble. Sabemos que no será fácil, nunca lo fue, pero como nuestros ancestros hace 5 siglos, nosotros seguimos resistiendo y construyendo la victoria todos los días.
Esa es nuestra fortaleza, el seguir con convicción el camino que los antepasados nos han marcado, el compartir del trabajo jornada a jornada, el trasmitir saberes a través de talleres para todos y todas, el ver crecer cada semilla en la huerta, en recuperar nuestra identidad en cada práctica ceremonial, en las visitas de las escuelas y esos pibes y pibas que interpelan la historia y se preguntan por su origen, por ese fuego que sienten de raíz cuando se encuentran con el legado indígena que late en Buenos Aires. En resguardar herramientas de Memoria como las vasijas que se desprenden del territorio y habitan en el Museo, en reparar nuestra historia dándole vida a una biblioteca indígena y comunitaria, en sentir a los ancestros en el aire, en las plantas, en la tierra, en nosotros.
Llegó un tiempo nuevo y nosotros mismos seremos la esperanza, todos podemos serlo, reivindicando nuestras raíces, defendiendo nuestra tierra, cuidando el legado de los ancestros, construyendo cada día en comunidad, así venceremos.
Un MIsmo Canto Recontextualizado
(Por Rosario Haddad)-.En 2015 niños, niñas y adultos de la aldea Jasy Pora nos transmitieron un canto que incluimos en el trabajo Vya Purahei (junto con Valeria Bosio y Julia Tiscornia). Años posteriores decidí transmitir esa misma canción en charlas y clases, por el mensaje, la letra y porque es muy hermosa. Fue una emoción escucharla en la ceremonia Ara Pyahu en la comunidad de Punta Querandí. Muchas gracias por darme un espacio durante el festival para hablar de la Etnomusicología y como la música atraviesa lo cotidiano y es también un lugar de resistencia.
Amenaza de Desalojo
Punta Querandí es una comunidad indígena pluriétnica enclavada entre los barrios privados, en una zona ancestralmente habitada por querandíes, chanás y guaraníes, que hoy corre peligro de desalojo por diversos juicios iniciados por Jorge O’Reilly, presidente de la desarrolladora inmobiliaria EIDICO. A la vez que amenaza a nuestra comunidad, este empresario es uno de los responsables de la destrucción del equilibrio ambiental en nuestra región por la construcción de barrios privados sobre miles de hectáreas de humedales, lo que dio como resultado el aumento de las inundaciones, el desplazamiento de pobladores históricos y la devastación de cementerios indígenas.
La empresa San Atanasio (de Jorge O’Reilly) nos acusa de ser usurpadores y pide nuestro desalojo a la justicia civil y penal. Por su parte, Punta Querandí reclama al Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) la ejecución del Relevamiento Territorial previsto en la Ley 26.160, sin obtener ninguna respuesta oficial.
Por Punta Querandí
Fotogría: Leo Crovetto, Diana Peña y Punta Querandí
