La información fue difundida en Nairoby por el Fondo de ONU para la Infancia (Unicef) en el Día Mundial del Refugiado.
Muchos menores abandonaron sus hogares en Sudán del Sur, para escapar de la guerra que enfrenta desde 2013 al Ejército leal al presidente, Salva Kiir, con los rebeldes comandados por el exvicepresidente Riek Machar, actualmente en Sudáfrica.
'Más de un millón de niños han sido obligados a abandonar sus hogares en Sudán del Sur, a menudo en medio de una violencia espantosa', declaró la directora regional de Uicef para África Oriental y Meridional, Leila Pakkala, en un comunicado emitido aquí.
Se calcula que desde el inicio de la contienda en diciembre de 2013, más de 1,8 millones de personas cruzaron las fronteras hacia los países vecinos y solo en el último año la población de refugiados en Uganda pasó de 500 mil a más de 1,25 millones de personas, indicaron medios de prensa sobre las dimensiones de la migración.
Solo Uganda recibió en 2016 un total de 532 mil 725 refugiados, el país que acogió al mayor número de ellos en todo el mundo, de los 65,6 millones de desplazados que se registraron en el mundo, según ONU.
'Kampala y Naciones Unidas solicitaron ocho mil millones de dólares para financiar intervenciones de respuesta de emergencia y resiliencia a la población de refugiados en Uganda durante los próximos cuatro años', sintetizaron los medios.
En el caso de Uganda, Unicef requiere casi 50 millones de dólares en 2017 y 30 millones cada año del 2018 al 2020 para dar servicios básicos de salud, nutrición, agua y saneamiento, educación y desarrollo de la primera infancia tanto para los niños refugiados como para los de la comunidad de acogida, precisó la agencia.
