De forma continúa se violan los derechos de los niños atrapados en medio de la ocupación israelí en Palestina, por ello demandaron medidas concretas e inmediatas para permitir que vivan libres de temor, señala el comunicado.
Además, deploraron que se utilicen a menores de edad como objetivos o instrumentos de la retórica política y la violencia.
El coordinador humanitaria en el Territorio Palestino Ocupado, Jamie McGoldrick; el jefe del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en esa región, James Heenan; y la representante especial de Unicef en Palestina, Genevieve Boutin, denunciaron tales atropellos.
'Los niños no deben ser objetivo de la violencia y no deben ser puestos en riesgo o ser animados a participar en esta', subraya el texto conjunto.
A pesar de esos reiterados llamados, cada semana surgen informes en la Franja de Gaza y otras partes del territorio palestino ocupado con detalles de niños muertos o gravemente heridos.
Del mismo modo, los niños en Israel están expuestos al miedo, el trauma y las heridas graves, indicaron los altos representantes humanitarios de la ONU.
Las partes en conflicto deben poner los derechos de los niños por encima de cualquier otra consideración e impulsar acciones para aliviar el sufrimiento de los más pequeños, recalcó el comunicado.
Tan solo este mes, siete niños palestinos fueron asesinados con munición real y bombardeos de Israel, según reportes de la ONU.
En tanto, dos niñas israelíes de 14 y 15 años sufrieron heridas causadas por cohetes y proyectiles de mortero.
Desde el comienzo de las protestas contra el deterioro de las condiciones de vida en Gaza, el pasado el 30 de marzo, 26 niños palestinos fueron asesinados: 21 durante la represión de Tel Aviv en las manifestaciones pacíficas y otros cinco en bombardeos israelíes o fuera del contexto de las protestas.
En ese mismo período, cientos de niños más resultaron heridos por munición real y muchos de ellos llevarán consigo siempre las secuelas de sus heridas debido a la amputación de extremidades.
Si bien la violencia contra los niños se presenta ahora en todo el territorio ocupado, la Franja de Gaza merece particular atención pues allí los menores son privados de todo derecho y viven en condiciones extremadamente precarias producto del bloqueo de Israel.
Las familias hacen frente a solo cuatro horas de electricidad en medio de un calor sofocante, los servicios de abastecimiento de agua están al borde del colapso y el líquido vital es cada vez más costoso y difícil de encontrar.
Después de la decisión unilateral del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de nombrar a Jerusalén como capital de Israel y trasladar a esa ciudad su embajada, las tensiones en el área aumentan, al igual que los enfrentamientos.
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