Cánticos de alto voltaje, bloqueo de las entradas y un virtual ultimátum al interventor de la empresa, Daniel Capdevil, por su dilación a dar una respuesta satisfactoria a sus empleados, que sólo quieren insumos para poder trabajar.
“En astillero resolvimos quedarnos en la fábrica hasta que nos garanticen
poder seguir trabajando, no sale nadie hasta entonces, ni siquiera los gerentes y el presidente. Por eso convocamos a los familiares y vecinos a acompañarnos en la puerta de la fábrica”, twitteó uno de los trabajadores durante la tarde de este jueves.
Los trabajadores que no estaban en esos momentos presentes, fueron instados a que “vengan y se queden en la empresa, hasta que se garanticen los derechos de los 3.309 laburantes del ARS”, consignó Noticias Ensenada.
La toma del Astillero comenzó cerca del mediodía, y prometía extenderse “si no hay una respuesta contundente del titular”, respuesta que llegó cerca de las 22 horas, con un acta acuerdo mediante el cual la empresa se compromete a suministrar los insumos necesarios para la continuidad de los trabajos.
Previa aprobación de la asamblea con los trabajadores presentes, el acuerdo fu firmado por el interventor Daniel Capdevila y los representantes gremiales.
“Los trabajadores del Astillero Río Santiago, demuestran una vez más, como en los años 90, su sentido de pertenencia a esta industria estratégica, defendiéndola como aquella vez, con la toma de acciones patrióticas que buscan no solo la reactivación del Astillero, sino que además persigue un modelo de país basado en la producción nacional, con inclusión social e inversión en Salud y Educación”, señalaron desde el gremio.
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