Hussein-Ali Amiri, vicepresidente para Asuntos Parlamentarios, dijo en rueda de prensa que en las últimas semanas Rohaní "llegó a la conclusión de que participará en las elecciones presidenciales".
Rohani, de 68 años, forma parte del sector reformista, mientras que los otros dos grandes grupos políticos, los conservadores y los de línea más dura, aún no han nombrado a sus candidatos.
Según los analistas políticos, por ahora ninguno de los posibles postulantes barajados tiene opciones reales de derrotar a Rohani, cuyo principal logro fue la firma del acuerdo nuclear entre Irán y seis grandes potencias en julio de 2015, que condujo al levantamiento de las sanciones internacionales que pesaban sobre el país.
La oposición, por ahora en silencio, espera verse beneficiada antes de las elecciones por un empeoramiento de las tensiones de la política exterior, sobre todo a partir de la victoria del estadounidense Donald Trump, indicó la agencia de noticias EFE.
Rohani expresó el sábado en un discurso su esperanza que las presidenciales sean "competitivas" y dejen a los enemigos de Irán "asombrados" y a los amigos, "esperanzados".
"Debemos alentar a la gente a trabajar más y a contribuir a la prosperidad del país mediante el voto", afirmó.
En varias ocasiones, Rohani destacó los logros de su gobierno, principalmente la mejora de la situación económica gracias al acuerdo nuclear.
El presidente iraní insiste en este punto con mucha frecuencia debido, principalmente, a las constantes críticas de diferentes sectores de la población por la falta de avances económicos en el día a día.
