A través de un decreto presidencial el Ministerio de Agroindustria perdonó a la empresa alimenticia Molinos Río de la Plata de la familia Pérez Companc el pago de la abultada cifra en dólares producto de una deuda generada con Aduana por el pago de gravámenes en ventas al exterior.
El comienzo de la semana llegó con un regalo para una de las empresas más ricas del país, es que en el Boletín Oficial se publicó un decreto a través del que el Ministerio de Agroindustria revocó una resolución del Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner por la cual Molinos Río de la Plata le debía a la AFIP unos 70 millones de dólares en concepto de gravámenes por ventas al exterior.
La situación comenzó a principios del 2008 cuando Néstor Kirchner traspasaba la banda presidencial a Cristina y se disponía que el aumento en la alícuota para las exportaciones de productos agrícola establecido en noviembre de 2007 sería retroactivo para las ventas registradas que se encontraran pendientes de embarque.
Para evitar el pago los exportadores debían acreditar la tenencia de los bienes a ser exportados, que se habían registrado en las declaraciones juradas de venta al exterior (DJVE). La empresa de la familia Pérez Companc afirma que puede acreditar la mercadería de diciembre de 2008 a septiembre de 2017, según consignó en su último balance anual (2017).
En el sitio oficial del Ministerio, la primera exportación de la empresa que, según la institución, no cumplía con estos requisitos figura con fecha de presentación a septiembre de 2007 y corresponde a la venta de aceite de girasol en bruto a granel. El monto reclamado por el fisco, según reconoce Molinos en sus estados contables, asciende a u$s 70,7 millones. Está asentado como pendiente de pago hasta que se resuelva la situacióin del recurso jerárquico presentado por la firma ante el Tribunal Fiscal de la Nación.
En el decretado publicado en el BO Macri exige que se resuelva "el recurso de reconsideración interpuesto por la empresa Molinos Río de la Plata contra la resolución ex ONCCA 1898, del 21 de julio de 2008", además agrega que "el recurso jerárquico bajo examen ha sido interpuesto en legal tiempo y forma, por lo que resulta formalmente admisible".
El Presidente hace hincapié únicamente en el caso de la empresa Molinos, a cuyos directivos acompañó hace pocos meses en la inauguración de una nueva planta de Luchetti en Tortuguitas. Allí Macri agradeció a los Pérez Companc por haber "apostado siempre a la Argentina".
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