Tres de ellos llegaron a la isla tras ser liberados el pasado 17 de diciembre (previamente ya habían regresado tras cumplir sus condenas Fernando y René), en una coyuntura marcada por el anuncio de La Habana y Washington de llevar a cabo acciones en pos de avanzar hacia la normalización de los vínculos.
Los Cinco, como se les conoce internacionalmente, fueron arrestados por autoridades estadounidenses en 1998 y sentenciados en un proceso amañado a desproporcionadas penas por alertar de acciones violentas impulsadas contra Cuba desde suelo norteamericano por grupos terroristas.