La Asamblea analizará un proyecto de resolución presentado por su presidente, el danés Mogens Lykketoft, que aboga por el fortalecimiento del sistema de Naciones Unidas a siete décadas de su creación, el 24 de octubre de 1945, cuando entró en vigor la Carta del ente mundial integrado en la actualidad por 193 estados.
El texto llama a desterrar del planeta las guerras y la pobreza, así como a ratificar el compromiso con el respeto a la independencia política, la autodeterminación de los pueblos y los derechos humanos.
En horas de la noche, el cuartel de la ONU, en el distrito neoyorquino de Manhattan, vestirá de azul, color identificativo de la organización, mediante un espectáculo de luces que adornará lugares emblemáticos del mundo de manera escalonada.
También en la Gran Manzana, el majestuoso Empire State -el edificio más alto del planeta entre 1931 y 1972- se teñirá de azul, al que seguirán sitios de Australia, Nueva Zelanda, China, Japón, Egipto, Rusia, España, Jordania, Reino Unido, Italia y Brasil, entre otros países.
Destacan entre los lugares que lucirán el color de la ONU, el Cristo Redentor de Río de Janeiro (Brasil), las grandes pirámides de Egipto, la Ópera de Sydney (Australia), la Gran Muralla China, el museo Hermitage (Rusia), las Ruinas de Petra (Jordania), la Torre de Pisa (Italia) y la Alhambra de Granada (España).
La jornada de festejos incluye un concierto en la sede de la Asamblea General, con la participación de una orquesta surcoreana, el famoso pianista chino Lang Lang y un coro de música Góspel.
