(20/01/16 - Inglaterra)-.
En la ciudad de Middlesbrough, en el noreste del país, decenas de casas aparecen con la puerta pintada de rojo a modo de advertencia de que la vivienda es habitada por refugiados, según una investigación publicada este miércoles por el diario local The Times.
Cuando la gente las ve (las puertas de color rojo), todo el mundo sabe que significan 'solicitantes de asilo'", denuncia un hombre cuya casa ha sido objeto de vandalismo por tener el color rojo que distingue a las viviendas de los refugiados.
La práctica ha sido criticada, entre otros, por un antiguo diputado local, que ha comparado la pintura roja que se utiliza en las desfavorecidas calles de la ciudad más pobre del país para marcar a los refugiados con las estrellas amarillas que distinguían a los judíos en la Alemania nazi.
El Ministerio del Interior británico ha anunciado este mismo miércoles la apertura de una investigación sobre las viviendas concedidas a los solicitantes de asilo después de que algunos de estos hayan denunciado que son blanco fácil de ataques, insultos y abusos, así como de lanzamientos de piedras, huevos o excrementos de perro contra sus casas, y que incluso se ha llegado a grabar o pintar signos de extrema derecha en sus puertas, en lo que califican como "régimen de apartheid", apunta el rotativo.
Las propiedades, unas 168 en total —de las que unas 155 de ellas han sido marcadas en rojo, según las pesquisas del rotativo—, son administradas por Jomast, una empresa subcontratista de G4S, que ofrece alojamiento a los demandantes de asilo en la ciudad de Middlesbrough.
The Times relata cómo los habitantes de una de las viviendas decidieron pintar de blanco la puerta por su cuenta al verse sobrepasados por la discriminación, pero al verlo un empleado de Jomast, se volvió a pintar de rojo porque el blanqueo iba "contra la política de la empresa".
"Cuando la gente las ve (las puertas de color rojo), todo el mundo sabe que significan 'solicitantes de asilo'", denuncia un hombre cuya casa ha sido objeto de vandalismo.
G4S ha negado "categóricamente" que hubiera intención alguna tras las puertas rojas, y ha ordenado a Jomast que vuelva a pintarlas. Sin embargo, la vecina Suzanne Fletcher sostiene que la cuestión se planteó hace ya cuatro años. "En septiembre de 2012, preguntamos a G4S si iban a hacer algo con las puertas rojas, y respondieron que no tenían ninguna intención de hacer nada", ha declarado a la cadena local BBC.
Por su parte, el también local diario The Guardian informa de que las autoridades de la cercana Newcastle están investigando también las viviendas de Jomast en su ciudad para comprobar si las puertas de las casas en que viven asilados están marcadas.
Desde hace meses, Europa afronta una afluencia sin precedentes de solicitantes de asilo procedentes, sobre todo, de países azotados por el terrorismo. La llegada de refugiados a diversos países europeos provoca reacciones diversas por parte de las naciones de acogida.