Horas después de que el Senado brasileño decidiera la madrugada de este miércoles someter a impeachment (juicio político) a la exmandataria, suspendida desde mayo, el Partido de los Trabajadores (PT) ha realizado una presentación ante la Organización de Estados Americanos (OEA), en la que denuncia la situación en el país sudamericano.
El PT ha presentado su demanda a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), criticando la forma en que se ha desarrollado el proceso de destitución de Rousseff. La Cámara Alta del Brasil ha aprobado con 59 votos a favor y 21 en contra un informe que lleva hacia la fase final del impeachment, que será realizada en dos semanas, entre el 23 y el 31 de agosto.
Este es un proceso viciado (…) fue un golpe parlamentario; estaremos gobernados por un presidente que no fue elegido, como es Temer", ha condenado el senador brasileño Jorge Viana
Además del Partido de los Trabajadores, han expresado su rechazo a la aprobación del mencionado informe distintos diputados, senadores y organismos. El senador Jorge Viana ha acusado de "golpistas" a los antiguos aliados del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) —el del presidente interino de Brasil, Michel Temer— que se han asociado a la principal fuerza de oposición, el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).
"Este es un proceso viciado (…) fue un golpe parlamentario; estaremos gobernados por un presidente que no fue elegido, como es Temer", ha dicho el senador Viana.
Mientras el Senado debatía el destino de la exdignataria, varios movimientos sociales y sindicatos salieron a las calles de ciudades como Brasilia, São Paulo, Aracaju y Belo Horizonte, para expresar su apoyo a Rousseff con el lema “fuera Temer”.
El coordinador del Frente Brasil Popular, Raimundo Bonfim, ha avisado de que se organizarán más protestas en los próximos días: "Esperamos poder revocar (el proceso) y por eso estamos luchando. Creemos en una mayor resistencia y un mayor rechazo al presidente interino Michel Temer".