La justicia anda desde hace semanas a la búsqueda de la hija de Choi, Chung Yoo-ra, que se cree que se encuentra en Alemania, donde la familia tiene varias propiedades.
Choi Soon-il, está considerada como el cerebro de la trama de corrupción que llevó al Parlamento a destituir a la presidenta surcoreana, Park Geun-hye.
Choi, de 60 años y amiga íntima de Park, está acusada de intervenir en asuntos de Estado a pesar de no ostentar cargo público y extorsionar a grandes empresas para obtener dinero que se habría apropiado parcialmente, entre otros cargos.
Por ejemplo, la fiscalía cree que el grupo Samsung, el mayor del país, firmó un contrato por unos 18,2 millones de dólares con una empresa con sede en Alemania, propiedad de Choi.
