Al intervenir en una ronda de preguntas y respuestas en el Consejo Nacional de Provincias del parlamento nacional, Mabuza abordó la marcha del actual proceso de reformas constitucionales encaminadas a la confiscación de tierras sin compensación, un paso que consideró relevante para promover la cohesión social.
Explicó que los patrones asimétricos de propiedad existentes en Sudáfrica deberían movilizar a todos los que buscan justicia para luchar en favor de la igualdad en la construcción de una Sudáfrica unida y próspera que refleja la Carta Magna.
Debemos enfrentar las faltas históricas y las injusticias que siguen amenazando nuestra paz y estabilidad para que finalmente podamos avanzar como un solo pueblo, una sola Sudáfrica fundada sobre valores compartidos, expresó.
El Vicepresidente afirmó que el programa de reforma agraria que está en estos momentos en preparación será inadecuado para mitigar el negativo impacto del legado del colonialismo y el apartheid.
La propiedad de la tierra continúa como fuente de frustración y resentimiento en aquellos que fueron privados brutalmente de sus parcelas, dijo Mabuza, quien señaló que por tanto es imperativo 'ejecutar un programa integral de reforma agraria que al ser implementado permita transformar nuestro país en una sociedad no racial, no sexista, humana e igualitaria.
Recordó que gran parte de la tierra en Sudáfrica está en manos de unos pocos y apuntó que el problema que confronta el gobierno es que 'nuestra proyectada política de emancipación no tendrá sentido hasta tanto no se alcance la emancipación económica y la propiedad de la tierra está en el centro de esa emancipación'.
Opinó que el mecanismo dirigido por el mercado para llevar a cabo la reforma agraria ha demostrado ser engorroso, prolongado e inapropiado.
'No es posible imaginar la estabilidad política, la paz y la democracia mientras la mayor parte de la tierra esté en manos de unos pocos (...) las perspectivas positivas de nuestro destino compartido dependen en gran medida de nuestra capacidad para resolver esta cuestión de la tierra de manera responsable y justa', subrayó.
El dirigente consideró que a menos que se adopten decisiones radicales para enfrentar el actual estado de inequidad y concretamente las injusticas del pasado, con firmeza y determinación, 'estaríamos posponiendo la inevitable fricción social que nos haría retroceder en lugar de avanzar como pueblo hacia un futuro próspero y compartido.'
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