“Es mentira. Es absolutamente falso que el señor Manafort haya venido a conversar del tema de Julian Assange”, ha subrayado Moreno en una entrevista sostenida este jueves con emisoras radiales locales, que han preguntado sobre un posible diálogo con Paul John Manafort, el ex jefe de campaña del presidente estadounidense, Donald Trump, como afirman algunos medios de comunicación estadounidenses.
De acuerdo con Moreno, Manafort fue parte de una delegación de inversionistas chinos que visitó Quito (capital de Ecuador) con el propósito de presentar proyectos y planes. “Jamás se tocó el tema de Julian Assange y peor negociar”, ha insistido el mandatario.
Assange, fundador de Wikileaks y refugiado en la embajada de Ecuador en Londres desde hace seis años, no puede abandonar la legación por temor de que las autoridades británicas lo extraditen a Estados Unidos donde podría ser procesado y condenado a muerte por filtrar secretos sobre el país norteamericano.
Al respecto, Moreno considera que “seis años ya es demasiado tiempo para que una persona permanezca casi encarcelada en una embajada”.
El jefe de Estado ha admitido que, aunque no le agrada la presencia de Assange en la embajada de Ecuador, siempre han sido respetados los derechos humanos del periodista.
Además, dice que Quito está en conversaciones con el Gobierno británico a fin de garantizar el respeto a la vida y los derechos humanos de Assange y ha dicho que Ecuador ha recibido una comunicación oficial de Londres, la cual resalta que, según la Constitución del Reino Unido, no se permite la extradición a lugares con peligro para la vida.
“Está hecho el camino como para que el señor Assange tome la decisión de salir a una casi libertad, porque no olvidemos que no se presentó a los juzgados británicos y tiene que pagar una pena por aquello. Eso lo decidirá la justicia británica”, ha indicado Moreno.
La situación del periodista australiano está especialmente en vilo desde la llegada al poder en Ecuador de Moreno, quien considera el caso “un problema heredado del anterior Gobierno”, el de Rafael Correa, que otorgó el asilo político al fundador de Wikileaks.
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