Degenhart precisó el lunes que 2772 hondureños y 255 salvadoreños pasaron a México, tras haber completado su procedimiento legal migratorio en la ciudad de Tecún Umán, en el departamento suroccidental de San Marcos.
México está viabilizando la entrada de este grupo de centroamericanos con sus propias estrategias migratorias, añadió, y afirmó que la Policía Nacional Civil (PNC) y el Instituto Guatemalteco de Migración (IGM) tienen instalados 18 puntos de control desde Agua Caliente y Valle Nuevo, en las fronteras con Honduras y El Salvador, respectivamente, hasta Tecún Umán.
El ministro guatemalteco también declaró que en estos puestos se verifica que los migrantes lleven sus documentos en regla; sin embargo, en la frontera entre Guatemala y México todavía hay alrededor de 1800 hondureños y salvadoreños a la espera de seguir la travesía hacia el territorio estadounidense.
Los migrantes tienen como primera opción llegar a EE.UU., pero en caso de no poder cruzar la frontera, ven como buena opción quedarse en México, ya que el Gobierno mexicano les ha otorgado una visa humanitaria que les permitirá obtener un empleo en caso de necesitarlo.
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